“Si imponen más controles de precios a productos lácteos, estos desaparecerán”

Para el asesor de Fedenaga, Rodrigo Agudo, el mercado informal está acaparando la producción de materias primas en detrimento de la industria nacional, que bajó a 40 % su capacidad instalada.
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Mientras está en suspenso el anuncio del alto Gobierno en materia de nuevas regulaciones de precios, en el sector empresarial persiste la preocupación en cuanto a más controles y exigencias de fijación de precios.
Los anuncios de los resultados de las mesas de trabajo entre funcionarios del Estado y representantes de gremios serán divulgados esta próxima, luego de que este sábado se suspendieran.
Fuentes empresariales dijeron a El Pitazo que, “como era previsible, no hay acuerdos o consensos entre los representantes del sector privado que llevaron a las reuniones las estructuras de costos de los 50 productos que serán regulados nuevamente. Fueron informes minuciosos y detallados que, al parecer, no fueron lo suficientemente estudiados por los técnicos del Gobierno”.
En todo caso, “hay que esperar lo que digan los funcionarios del Estado. Hay rumores de que el Ejecutivo se reservará el control de 70 % de la cadena productiva de las pocas empresas activas que quedan en el país; esperemos que eso no sea cierto, pues se profundizaría la crisis alimentaria”, explicó el informante, quien solicitó el anonimato.
Uno de los sectores más sensibles a la regulación es el lácteo. Conseguir un litro de leche pasteurizada en los mercados es una proeza. Ni hablar de la leche en polvo: ese es un producto que desapareció de Venezuela.
Últimamente está llegando a los centros de distribución el litro de leche de larga duración, a un costo que oscila desde Bs. 1.250.000 hasta los Bs. 1.500.000.
“En la Venezuela de 2018 la gente no está tomando leche pura sino fórmulas lácteas; es lo que se puede producir con lo que se consigue en el mercado de materias primas. Los controles de precios y de cambios han afectado mucho la actividad de la industria de quesos y de leche del país. La láctea está trabajando con menos de 40 % de su capacidad instalada; no hay condiciones para trabajar”.
Así lo declaró a El Pitazo Rodrigo Agudo, exdirectivo de la Cámara Venezolana de la Industria Láctea (Cavilac) y actual asesor de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga).
Señala que la gran mayoría de la materia prima que se genera en las 140.000 fincas que trabajan con leche y carne “se vende en mercados informales o secundarios donde no hay regulaciones de precios. Los llamados queseros artesanales compran el producto al precio de mercado, que dista mucho del regulado que desde hace años impuso el Gobierno”.
Agudo expresó que, según cálculos del sector privado, 85 % de esas 140.000 fincas, entre grandes, medianas y pequeñas, producen leche que se vende en grandes cantidades en el mercado secundario, “lo que afecta a la industria nacional, que no tiene cómo surtir sus plantas. Ante la escasez de productos y el aumento de la demanda en una economía con precios controlados y con hiperinflación, las pérdidas son cuantiosas”.
Calcula Agudo que hay 105.000 oferentes de leche a unos 10.000 compradores. Aproximadamente, la mitad se dirige a leche y la otra a quesos y sus derivados. “Y el mercado informal es el que impone la pauta al contar con precios competitivos para los productores, que deben comprar en divisas los insumos para alimentar a las vacas, fertilizantes y envases, así como los equipos de refrigeración industrial para almacenar la materia prima. Además, está el tema de la transportación, que agrega costos muy elevados a la estructura de precios que deben manejar los ganaderos”.
El asesor de Fedenaga advierte que “la leche está tan cara porque la crisis de producción constituye un problema estructural, al igual que en la mayoría de los productos del área de alimentación. Hay que tomar en cuenta hasta el tema de los empaques; todos se compran en el exterior y no ha habido asignación de dólares baratos a los industriales venezolanos, quienes han tenido que importar la materia prima para envasar los productos de larga duración. Todo es una cadena que encarece los quesos y los lácteos”, sostuvo.
Añade a su análisis que por el sector Gobierno hay capacidad instalada de producción de leche, pues maneja la fábrica de lácteos Los Andes, nacionalizada bajo el mandato del fallecido presidente Chávez.
En la página web de la empresa, destaca que Lácteos Los Andes cuenta con dos plantas: lácteos Machiques (que antes perteneciera a Parmalat) y la de San Simón. En teoría, atiende a 50 % del mercado nacional.
Otras fuentes de la industria dijeron a El Pitazo que desde 2007, año de su nacionalización, Lácteos Los Andes pasó de productora a importadora, “y no atiende su cuota de 50 % del mercado, produce muy poco y son jugos de frutas pasteurizados a precios nada socialistas. Todas las semanas suben los precios de esos productos. Lo último que se supo fue la importación de leche pasteurizada desde Nicaragua, de la empresa Centrocac”.
Hábitos de consumo
Rodrigo Agudo explicó a El Pitazo que “las regulaciones siempre han fallado; en el caso de la producción de quesos, esta se ha centrado en unos 12 estados del país donde están instalados los queseros artesanales. En el interior uno puede ver cómo en un local pequeño se fabrica el palmizulia, la cuajada, el duro, el tipo paisa y el de mano, sin que necesariamente se respeten las condiciones y los permisos sanitarios y a precios que superan ampliamente al impuesto por regulaciones a los de la industria formal. Tampoco sabemos si la refrigeración es la adecuada y cuánto tiempo está el producto fuera de cavas especiales antes de que llegue a los centros de distribución. El tema transporte también atenta contra la eficiencia de la distribución de la industria formal y de la informal; por eso la crisis es estructural”, dijo.
En relación con el consumo de leche en Venezuela, el analista de mercado señala que “antes de que se agudizara la crisis económica, el venezolano, en promedio, consumía 120 litros de leche por año. Para 2017, la cifra bajó a menos de la mitad; nuestra gente no se está alimentando bien y no es solo con el rubro lácteo, es con todos”.
Aseguró que “los precios acordados son imposibles de fijar y menos en lapsos largos. Los costos de los alimentos suben a diario en esta economía hiperinflacionaria, por lo que un control o acuerdo de precios puede fracasar. Los empresarios están haciendo su mejor esfuerzo posible y los representantes gremiales que asistieron a las reuniones con el Gobierno fueron bien claros: si una economía no está sana, mal podrían imponerse nuevos controles de precios; se entregaron propuestas e ideas para que la economía mejore”.
Autor: Elizabeth Ostos
Fuente: El Pitazo
Link: https://elpitazo.com/economia/analista-si-imponen-mas-controles-de-precios-a-productos-lacteos-estos-desapareceran/

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Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

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