En valor, crecieron 176%, con una facturación de US$ 58,8 millones, de acuerdo a los datos de la Secretaría de Comercio Exterior, procesados por Milkpoint.
La suba se dio contrario a las expectativas de analistas locales y empresarios, que esperaban un enfriamiento de las compras al exterior.
A fines del año pasado era que la mejora en los precios internacionales de los lácteos -que volvieron a niveles de US$ 3.500 por tonelada – desestimularan las importaciones de la mano de mejores perspectivas para la producción de leche en Brasil. Sin embargo, los analistas no tomaron en cuenta la fuerte caída del dólar en ese país, que estimula las importaciones. En enero de 2016, el valor promedio del dólar fue de R$ 4,0547 y en enero de este año, en R$ 3,1969.
Marcelo Martins Costa, director ejecutivo de Viva lácteos, señaló que la menor disponibilidad interna de leche estimula las importaciones, pero considera que las compras externas en 2017 se ubicarán por debajo de los volúmenes del año pasado, a medida que se recupere la producción.
Una fuente industrial dijo a Milkpoint que todavía hay falta de materia prima en el mercado. Consideró que la producción brasileña de leche frenará su caída en 2017, luego de dos años de retracción debido principalmente a los altos costos de producción y problemas climáticos.
Brasil sigue consolidándose como destino para Uruguay
Brasil sigue consolidándose como el destino por excelencia del sector. En enero de este año concentró 67% de las exportaciones totales de lácteos y multiplicó por siete los montos importados en relación al mismo mes del año anterior, de acuerdo a los datos de comercio exterior procesados por el Instituto Uruguay XXI.