En los últimos diez años el consumo de productos alternativos a la leche se disparó un 8 % anual. Un reciente artículo de Rabobank señala que hace décadas que las alternativas a los lácteos compiten con la lechería, y esa disputa se ha intensificado.
En el mundo crece el consumo de bebidas alternativas a la leche, y lo hace de forma clara. Un reciente artículo difundido por Rabobank señala que “los consumidores están cada vez más libres de lácteos”, y hasta la “biotecnología entró en la disputa elaborando proteínas de la leche a través de la biofermentación”, por lo tanto “es el momento adecuado para que el sector lácteo reflexione sobre el éxito de los productos alternativos” y actúe en consecuencia, considera el último informe RaboResearch sobre productos lácteos Dare Not to Dairy, qué significa el uso de productos lácteos sin lácteos…, y cómo la industria puede responder.
Desde hace décadas “las alternativas lácteas” están compitiendo con la lechería, y esa “competencia se ha intensificado a medida que las alternativas lácteas se amplían en tipos, estilos y categorías de productos”.
“En los últimos diez años, el crecimiento de las ventas minoristas mundiales de alternativas lácteas se ha disparado a una tasa del 8 % anual” y con “las ventas minoristas valoradas en 15.600 millones de dólares, la ‘leche’ sin productos lácteos representó el 12 % de la leche líquida total y las ventas alternativas a nivel mundial en 2017”, según datos de Euromonitor citados por Rabobank.
“La nutrición, el precio y el sabor tienden a favorecer a los lácteos, pero las percepciones cambiantes de los consumidores sobre la salud, las opciones de estilo de vida, la curiosidad y la sostenibilidad percibida atraen cada vez más a más personas a seleccionar productos ‘sin lácteos’”, explica.
Tom Bailey, analista senior de RaboResearch – Dairy dijo que “se espera que la demanda mundial de productos lácteos crezca un 2,5 % en los próximos años, con la demanda de categorías no fluidas que compensen las ventas de leche líquida débil”.
“Si bien no es esencial diversificarse en alternativas lácteas, sería sabio para la industria láctea al menos aprender algo del éxito de las alternativas lácteas, que pueden estar poniendo al consumidor primero”, añadió Bailey.
El artículo difundido por Rababok entiende que “el principal desafío para los lácteos recae sobre la leche líquida, donde las ventas minoristas en Europa occidental (U$S 18,6 Bn.) y EE. UU. (U$S12,5 Bn.) disminuyeron a una tasa anual de 5 % y 3 %, respectivamente, en los cinco años hasta 2017, según Euromonitor”.
“Los resultados de los últimos cinco años han favorecido a los productores lácteos que han invertido en alternativas lácteas en toda la cadena de suministro, desde la plantación de almendros hasta la compra de marcas. Las inversiones en alternativas lácteas han demostrado rendimientos superiores a los productos lácteos independientes, finaliza.
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Fuente: TodoElCampo
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