Luego de la decisión del Gobierno de aumentar el costo del diésel común en G. 440 por litro, para llegar a G. 4.630, diferentes sectores y analistas vaticinaron que dicho incremento tendría un efecto dominó sobre los productos de la canasta básica.
Sin embargo, desde la Cámara Paraguaya de Industriales Lácteos (Capainlac) se estima que el reajuste del precio de los lácteos tendría muy poca implicancia dentro de la economía del consumidor, ya que se encuentra en una temporada alta de producción, comentó Becker a Última Hora.
«Al haber un sobrante de leche, difícilmente se pueda adecuar el precio debido al aumento del producto, por lo que los lácteos van a accionar poco y nada ante la suba del combustible», mencionó el titular del gremio lechero.
Becker manifestó que normalmente los precios se recuperan en marzo o en abril. «El reajuste del precio tendría una implicancia ínfima porque la competencia en el mercado está muy dura. Inclusive, contrariamente a la suba del gasoil, el precio de la leche bajó», enfatizó.
Con respecto a que se pueda dar algún incremento a mediados del año, Becker aseguró que eso se mantendrá pendiente. «La oferta y la demanda regulan los precios», afirmó.
Sobre el reajuste del diésel común, combustible que es el más utilizado a nivel nacional, Becker expresó que mantiene su postura sobre el libre mercado. «Si los precios del crudo suben en el mundo, entonces habrá que hacer los reajustes; por lo que es mejor que se haga de forma gradual a que después suban muy de golpe. Lo mejor siempre es hacer un reajuste razonable y absorber los sobrecostos», señaló.