Esta mañana un grupo de integrantes de la Asamblea Social del Agua (ASA) y la asociación Ecotuzuapan realizaron una protesta en la plaza comercial el Triángulo de las Ánimas para exigir se revierta la privatización del agua en Puebla, pues se argumentó que es más caro comprar un litro de agua que de leche en este estado.
Expusieron que un litro de leche bronca lleva a costar 8 pesos, cuando el litro de agua en Puebla se consume en un promedio de 10 pesos.
Posterior al acto, los manifestantes caminaron hacia el río Atoyac, a dos calles de distancia, donde realizaría un recorrido por el afluente, el segundo más contaminado en México no sólo por el uso doméstico sino también por la industria textil y automotriz que continúan arrojando al cause sus desechos sólidos.
La protesta estuvo encabezada por la investigadora María Eugenia Ochoa y José Luis García Bello, quienes además demandaron una auditoría ciudadana a la empresa Concesiones Integrales SA de CV, que privatizó el agua en Puebla.
La jornada se realiza a propósito del Día Mundial del Agua, por lo que anunciaron que debido al receso del Congreso del estado será hasta la próxima semana cuando entreguen una iniciativa para reformar la Constitución estatal y elevar el agua en Puebla a derecho humano.
Advirtieron que Puebla está sumergida en una crisis del recurso hídrico provocado por una serie de factores, entre ellos el encarecimiento del servicio hasta en un 400 por ciento, la falta de infraestructura y mantenimiento a una red vieja.
De paso reclamaron a Concesiones Integrales que no ha cumplido con la inversión para mantenimiento de la red hídrica en la capital y los municipios donde privatizó el suministro de agua.
Tras la privatización en 2013, María Eugenia Ocho aseveró que esta medida sólo se tradujo en alzas galopantes a las tarifas de agua, con un servicio que día a día se va deteriorando, ya que a la fecha además no se redujo el tandeo del suministro en las colonias como San Manuel, aunque la ciudadanía pague puntual.
Refirió que es pésima la calidad del agua en Puebla, pues está muy lejos de ser potable para el consumo humano, por lo que la gente tiene que desembolsar recursos para su adquisición por medio de garrafones.
Durante la protesta los ciudadanos exclamaron “el agua no se vende, se ama y se defiende”, “el agua es un tesoro que vale más que el oro”.
Hicieron público su negativa a la privatización del agua, que ha menguado la calidad de vida de los poblanos, en beneficio de la empresa concesionaria.
Los participantes portaron lonas donde se pudo leer: “El agua está en nuestro cuerpo, ¿por qué no las venden?”, la cual fue colocada en el puente peatonal de la zona de Ánimas.
Al último, hicieron un llamado a la ciudadanía a informarse y organizarse para defender el derecho humano al agua, que ha sido vulnerado por la privatización del agua en Puebla.
Asimismo a exigir que se abrogue la Ley de Agua del Estado, para que su administración regrese al Estado y al Municipio, con su consiguiente Remunicipalización.