El grupo Leite Río ha informado hoy de que ya ha puesto en marcha una «hoja de ruta» con el objetivo de «rentabilizar» sus rutas de recogida de leche en Galicia, de modo que pasará de recoger diariamente 755.000 litros en las explotaciones gallegas a un millón de litros en marzo del próximo año, unos 30 millones de litros al mes.
Según datos facilitados a EFE por el propietario de la empresa, Jesús Lence, en abril del pasado año el grupo recogía la producción de 876 ganaderos con un total de 31 rutas y una media de 725.000 litros al día.
Desde principios de 2015, Leite Río dejó la recogida de leche en León y Asturias y se centró «exclusivamente en Galicia», de modo que en la actualidad recoge la producción de 857 ganaderos gallegos, a través de 30 rutas, y con una media de «755.000 litros al día».
En cuanto a la «hoja de ruta» para la campaña láctea que acaba de comenzar, Leche Río pretende llegar a un millón de litros de leche al día en las explotaciones lácteas gallegas, unos treinta millones al mes en marzo de 2017, con 30 rutas y la incorporación de camiones más grandes a la recogida.
Actualmente, en la planta de Leyma «entran 200.000 litros al día» procedentes de ocho rutas de la provincia de A Coruña, todas centradas en «ganaderías sostenibles» y «con la certificación 100 % Galega».
Lence reconoce que el final del sistema de cuotas provocó «una gran especulación» por parte de «los primeros compradores», porque algunas ganaderos están vendiendo la leche de sus vacas como si fuese destinada «a polvo», pero su destino son lugares «donde no existen» instalaciones para llevar a cabo esa transformación, como «Avilés, El Escorial (Madrid) o Burgos».
«Esto está provocando problemas económicos a productores que han realizado inversiones para tener unas explotaciones sostenibles y un justo precio por su leche. También provoca fuertes trastornos a industrias del sector que no entraron en ese juego de comprar leche con destino a polvo para envasarla en brick (cartón) o en botella», precisó.
Desde su punto de vista, la «Xunta de Galicia es conocedora fiel» de «los problemas reales del sector que, dentro de su gravedad, no son dramáticos, como quieren hacer ver algunos sindicatos».
De hecho, a su juicio, medidas adoptadas como «las subvenciones para aumentar pastos» o las ayudas «a jóvenes ganaderos» van a «dar sus frutos a corto plazo».
Además, afirmó que «en este momento no está quedando ni un solo litro de leche sin recoger en el campo gallego» y opina que «el grave problema de los primeros compradores» podría quedar resuelto cuando el Ministerio de Agricultura apruebe «la nueva reglamentación.
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