El sector ganadero de Nicaragua continúa denunciando la presencia de mezclas lácteas que no son leche, así lo dan a conocer los medios del país vecino.
La Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo (CANISLAC) y la Federación de Asociaciones Ganaderas de Nicaragua (FAGANIC), acusan a cierta empresa mexicana de desestimular el consumo de leche al ofrecer mezclas lácteas o sucedáneos y de colocarlas “con intención de confundir a los consumidores” en los mismos estantes que la leche.
La Cámara ha solicitado al gobierno de Nicaragua que obligue a la industria láctea a detallar en empaques y etiquetas la composición de las mezclas lácteas que ofrece cierta empresa, mientras las organizaciones ganaderas continúan a la espera de una respuesta oficial.
Los ganaderos también consideran desleal que en lugar de incrementar el acopio de leche fresca, esta empresa mexicana incremente la producción de leches, que no son leches, utilizando mezclas de suero y grasa vegetal.
En Honduras, el sector ganadero y gobierno se mantienen alertas ante una posible invasión de productos importados que no son leche y que tiendan a confundir al consumidor con etiquetas que contengan imágenes y mensajes alusivos a la producción láctea original representando un riego para los ganaderos.
La Federación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Honduras (FENAGH), ha hecho un llamado a la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), Secretaría de Salud Pública, Secretaría de Desarrollo Económico para que las dependencias del SENASA, específicamente los encargados de velar por las normativas y Protección al Consumidor estén atentos y realicen inspecciones y operativos para que se proteja al consumidor hondureño de los engaños de los productos que se pretenden importar de Nicaragua y México.
Asimismo, la FENAGH ha realizado un llamado a los consumidores para que estén alertas y procedan a leer las etiquetas e identificar los productos lácteos y las imitaciones que usan mezclas de grasa vegetal.
Por su parte, Leopoldo Durán, presidente de la Federación Centroamericana de Lácteos (FECALAC), sostiene que “debemos de proteger a nuestro productores nacionales y garantizarles su presencia en el mercado nacional, eso nos preocupa enormemente y ya estamos tratando de crear una estrategia porque en la medida que sea desplazado nuestro producto el más afectado es el productor hondureño”.
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