José Carlos Cordoví Urquiza, director de negocios en la entidad, aclaró que en la Unidad Empresarial de Base de Manzanillo se realizó una reparación capital y allí son capaces de asumir los compromisos de ese alimento para la propia ciudad costera, más los municipios vecinos de Yara y Bartolomé Masó.
“Estamos al día con el encargo social como la canasta básica, el consumo social, la gastronomía y los mercados del sistema de atención a la familia.
“No hemos tenido dificultad con la merienda escolar, y tenemos la responsabilidad de mantenernos así, mientras, cumpliremos con los 12 mil galones de helado de la gastronomía sin dificultad, pues aunque en el 2017 la fábrica se ha detenido en algún que otro momento, hemos sido capaces de recuperarnos.
“Hasta diciembre se había acopiado aproximadamente 20 millones 800 mil litros de leche, comportándose al 101 por ciento, aunque decrecerá con respecto al 2016 en 700 mil litros”, explicó Cordoví Urquiza.
El director de negocios dijo, también, que por primera vez lograrán alcanzar las cifras pactadas en la venta en moneda libremente convertible.
Durante el transcurso del año 2017 se ejecutaron alrededor de siete millones doscientos mil pesos en mantenimiento y tres millones en inversiones, de los cuales, más de un millón se utilizó para adquirir equipos de transporte, lo cual mejoró significativamente el parque, con más de 30 años de explotación.
“Se mejoraron los filtros sanitarios de los Combinados Lácteos Bayamo, La Hacienda, la Unidad Empresarial de Base en Manzanillo, El Alba, y está en proceso Lácteos Media Luna.
“Para el 2018 está prevista la entrada de equipamiento tecnológico, que mejoraría significativamente las condiciones de nuestra Empresa porque tenemos tecnología obsoleta que dificulta la eficiencia”.
José Carlos Cordoví resaltó que las máquinas actualmente trabajan debido al esfuerzo y empeño de los aniristas.
“En Dietéticos Bayamo se ejecutó una inversión en el salón de llenaje de la línea de leche condensada, la cual garantiza la inocuidad, además, se le anexó un espacio para llenar pomos, en formato de 800 mililitros del producto, muy demandado por la población, y que se expende en la red de mercados ideales, además, se le suministra a hoteles.
“La perspectiva para el 2018 es continuar con esta producción envasada en lata y pomo, con capacidad de elaborar entre 60 y 80 toneladas mensuales, en dependencia de la demanda”.
Mil 500 trabajadores tiene esta entidad que produce alimentos de gran aceptación por la población granmense, y a pesar de los problemas tecnológicos, lograr estabilidad y calidad en las producciones es siempre el propósito.