El país está inundado de quesos importados que se venden a precios más bajos que los de producción nacional, en perjuicio de los productores locales.
La denuncia la hizo ayer el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche (Aproleche), Eric Rivero. Dijo que muchos de los quesos importados venden aquí en supermercados y otros negocios, más baratos que en sus países de origen, lo que se puede comprobar buscándolos en Internet.
Llamó a las autoridades de la Dirección General de Aduanas a tomar medidas contra los quesos que vengan con etiquetas alteradas, para que luego no haya que recogerlos en los establecimientos comerciales. Recordó que existe la costumbre de que por Aduanas entren todas las mercancías cuyos dueños paguen los impuestos, sin tomar en cuenta algunas leyes y normas que lo impiden.
Consideró que Aduanas debe ser el primer colador para no permitir que entren al país las mercancías que violan leyes y normas locales. El presidente de Aproleche manifestó que lamentablemente, en el país no hay un control efectivo de las importaciones de lácteos, principalmente de quesos.
Rivero, también presidente de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (Confenagro), informó que en el país se han tecnificado unas 50 pequeñas y medianas queserías, con préstamos a intereses blandos otorgados por el Consejo Nacional para la Reglamentación y Fomento de la Industria Lechera (Conaleche), de fondos entregados por el Gobierno. Indicó que las pequeñas y medianas queserías, que consumen la mitad de la leche de producción nacional, tienen cerca de 40 mil empleados. Señaló que a través del Conaleche han venido al país expertos queseros de otras naciones, a enseñar a los de aquí a fabricar quesos y otros productos lácteos mejores. El ganadero expresó que los dueños de las pequeñas y medianas queserías del país están incentivados y van al Conaleche en busca de préstamos para modernizar sus negocios, pero encuentran dificultades con el registro sanitario y otros requisitos, que les toman tiempo.