La exportación de quesos duros sigue registrando precios horribles
Los precios FOB siguen planchados.
La exportación de leche en polvo entera –si se consiguen, claro, ROE blanco suficientes– es uno de los mejores negocios agroindustriales presentes en la actualidad. La contrapartida de ese fenómeno es la venta externa de quesos duros.
En lo que va de 2014 se declararon exportaciones de quesos duros (fundamentalmente reggianito y parmesano argentino) por 1098 toneladas a precio FOB promedio ponderado de 6,82 u$s/kg.
En el primer trimestre de 2013 se habían registrado 1583 toneladas a un promedio de 6,51 u$s/kg, mientras que en el mismo período de 2012 se declararon 3029 toneladas a 6,55 u$s/kg.
Un valor promedio de 6,82 u$s/kg equivale a 54 $/kg al tipo de cambio oficial. El dato es que el precio minorista de los quesos duros de primera marca en cadenas de supermercados de la ciudad de Buenos Aires se encuentra en 155 $/kg (¡casi 190% más!).
Producir quesos duros requiere inmovilizar capital (leche) durante varios meses (a razón de 14 litros por cada kilogramo). Es decir: se trata de un negocio no apto para épocas de alta inflación.
El precio mayorista interno de los quesos duros es actualmente bastante superior al recibido por clientes internacionales. Pero algunas industrias lácteas siguen colocando esa mercadería en el exterior para mantener aceitados canales comerciales que adquieren una diversidad de otros productos lácteos.
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