Pese a la reducción de los embarques de leche en polvo a Brasil y de las cuotas creadas para evitar un suministro de importaciones que pudiese comprometer la competitividad de la producción brasileña, Argentina ya es la responsable por casi la mitad del volumen de lácteos importados desde Brasil. Según cálculos del Centro de Estudios Avanzados en Economía Aplicada (Cepea), las industrias argentinas contribuyeron con el 49% de los productos importados por Brasil entre enero y mayo de este año. Por su parte, Uruguay ocupa la segunda posición como abastecedor de lácteos con un nicho de mercado del 44%. De todas formas, las importaciones brasileñas totalizaron el equivalente a 393,4 millones de litros en enero-mayo, un descenso del 26% en comparación con los 536 millones de litros del año pasado. Del total importado en 2013, la leche en polvo respondió por el 63,9% de las compras al exterior de Brasil.
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