Exportar más productos procesados, como yogur y helados, además de manteca y queso, en lugar de concentrarse en la leche en polvo, así como explorar la posibilidad de vender capacidad técnica y conocimiento en África, Cuba y Venezuela.
Esas fueron algunas de las principales recomendaciones a la lechería uruguaya que hizo el coordinador global para el sector lácteo de la Corporación Financiera Internacional (IFC, por su sigla en inglés) del Banco Mundial, Juan Gonzalo Flores, al ser consultado por Campo.
Escribe Mauro Florentín
Ese economista, que cuenta con un máster en Finanzas Internacionales por la Universidad de Glasgow, Gran Bretaña, fue uno de los expositores en la Asamblea por los 25 años de la Federación Panamericana de Lechería (Fepale), que se realizó entre el martes 22 y el viernes 25 en Colonia.
En el negocio de los lácteos “los mayores márgenes se los llevan los que producen yogur y helados” y “no tanto en la leche fresca”, señaló.
En cuanto al tema principal de su exposición que fue el de las perspectivas de la cadena láctea hacia 2017, Flores dijo que “va a mejorar el precio de la leche en la próxima década”.
En los últimos remates de la plataforma digital de la empresa neozelandesa Fonterra hubo incrementos en los valores promedio de los lácteos. Entre el 1º de diciembre de 2015 y mediados de noviembre de 2016, el precio de la tonelada de leche en polvo, que es el principal producto de exportación del sector lácteo uruguayo, pasó de U$S 2.260 a U$S 3.423 en esa plataforma internacional. Mientras que el valor promedio de exportación de ese producto de Uruguay fue de U$S 2.754 por tonelada en octubre, lo que es 18% mayor al registrado a fines de 2015, según datos del Instituto Nacional de la Leche.
El coordinador de la IFC consideró que esa tendencia al alza “continuará” y presentó un índice de valores de los lácteos elaborado en ese organismo.
Tomando un promedio del precio de los productos derivados de la leche en este año, Flores informó que el índice da unos U$S 34 por 100 kilos de leche. Y la evolución fue así: entre abril y mayo de 2016 estuvo en U$S 22, a partir de junio empezó a repuntar llegando a U$S 24,2, en julio subió a U$S 25, en agosto a U$S 28, en setiembre U$S 33 y en octubre U$S 34.
Siguiendo esa tendencia y asumiendo un crecimiento de 3% en la población mundial, el precio se ubicará en unos U$S 41 por cada 100 kilos de leche o U$S 0,41 por litro en los próximos 10 años, según la proyección que hace la IFC del Banco Mundial.
Al igual que en otros organismos internacionales, Flores se apoyó en el argumento de que debido al incremento poblacional y del ingreso per cápita en la clase media en el mundo “es obvio que el crecimiento de la demanda de leche crecerá”.
La demanda de productos lácteos de Estados Unidos y Europa estará estancada pero aumentará en países emergentes, especialmente en el Sudeste Asiático, comentó. Destacó también que los países latinoamericanos “crecerán a un ritmo mayor a los europeos y tanto la demanda como la producción provendrán de las naciones emergentes”. Eso “se debe a que tienen los recursos para producir, agua y tierras, entre otros factores”, acotó.
Complementariamente, ese economista dijo que algunos países de la región “están mejor posicionados por sus menores costos de producción, sea el caso de Argentina, Brasil y Uruguay”.
En cuanto a la producción de leche, “Uruguay si no es el más eficiente está entre los más eficientes productores de América Latina”, resaltó y elogió a Conaprole porque “es una de las más eficientes compañías del sector de la región”.
Grandes ligas
Respecto a la importancia de aumentar y diversificar la canasta exportadora lechera, Flores comentó que el negocio en el sector lácteo “no está tanto en la leche fresca”, sino que “los grandes márgenes están en los productos de valor agregado, principalmente en el yogur y en el helado”.
“Si Conaprole es capaz de exportar estos productos con mayor valor agregado, entonces estaría entrando a las grandes ligas”, valoró.
Los países, a medida que van agregando valor a la leche fresca mediante la elaboración de manteca, quesos, yogur y helados, mejoran los ingresos y los márgenes. “Y esa es la única manera de protegerse de los precios bajos”, consideró.
Al analizar la situación compleja de la lechería, ese coordinador de la IFC señaló que “Nueva Zelanda inundó a todo el mundo con leche en polvo y llegó al punto de que a los grandes procesadores les resultaba más barato importar ese producto que comprarles la leche a los tamberos”.
“Eso puede producir un caos social muy grande”, advirtió.
La caída de los precios de los lácteos obligó a productores lecheros a dejar esa actividad o a reducirla, lo que generalmente trae aparejado problemas sociales.
Sobre ese asunto, Flores explicó que “una de las tendencias hacia el futuro es que habrá cada vez menos tambos. Las empresas ganaderas lecheras serán más grandes y el actual promedio de 2,9 vacas por finca (predio) pasará a casi cuatro vacas a escala mundial”, pronosticó en función de estudios de ese organismo. Agregó que en ese contexto “las explotaciones más pequeñas irán desapareciendo”.
La proyección de la IFC es de 3,7 animales por predio lechero en 2025.
Alianzas
Ante la tendencia a la concentración de la producción lechera en grandes y pocos empresarios, el coordinador global de la IFC dijo que “la recomendación es la de siempre” y apunta a “la creación de alianzas productivas”.
“Que los grandes procesadores trabajen conjuntamente con los pequeños productores, no veo otra forma para una sinergia mejor”, enfatizó. En ese sentido valoró la tradición y la experiencia uruguayas de las cooperativas lecheras, como Conaprole, Calcar, Claldy, Coleme y otras.
Consideró que “cuando los pequeños tamberos están atados lealmente a los grandes procesadores pueden estar mejor protegidos que estando solos”.
Considerando el tamaño pequeño de Uruguay en comparación con otros grandes jugadores de la lechería internacional, Flores planteó que además de apostar a la exportación de lácteos con un procesamiento industrial mayor, otra alternativa podría ser la venta del know how a otros países.
“Cuando tu mercado interno es chico tienes que pensar en exportar, pero también se puede exportar la capacidad técnica”, indicó. Analizó que “uno de los grandes continentes llamados a ser uno de los mayores productores de leche es África, pero sus capacidades son muy precarias”.
Y si Uruguay no puede exportar productos tal vez puede vender el conocimiento para producir, señaló.
Citó además a Cuba y Venezuela, que pueden ser una alternativa para que los uruguayos hagan una transferencia de conocimiento.
Coca-Cola
Flores, que además es responsable del área de agronegocios para la región andina de la IFC, se refirió a otros cambios que pueden darse en los años venideros en ese sector en los países de la región.
Hay una tendencia a “consolidar mucho más” el negocio de los alimentos “en jugadores grandes”, dijo.
Comentó que la empresa Coca-Cola empezó a comprar empresas lácteas en diferentes países, como en Panamá, en Ecuador y otros.
“No me extrañaría que en algún momento estas grandes compañías de bebidas invirtieran en la compra de una industria lechera en Uruguay”, sugirió.
http://www.busqueda.com.uy/nota/el-precio-de-la-leche-mejorara-y-se-ubicara-en-us-041-el-litro-en-la-proxima-decada-segun-banco