Los inventarios de insumos para la leche en polvo y la pasta están en niveles críticos, informaron representantes de ambos sectores. Simón Nobile, presidente de la Asociación Venezolana de Fabricantes de Pastas Alimenticias, señaló que en la industria existe materia prima para un mes en promedio, cuando lo idóneo es tener insumos para 3 meses.
«Hay una situación crítica de niveles de inventario y se complica por la demora en el otorgamiento de divisas», dijo. Aclaró que en las últimas semanas hubo algunas liquidaciones, por lo que hay cargamentos de trigo en camino.
El proceso también ha sido lento por el retraso en la autorización de permisos. «Desde que se toma la decisión de importar hasta que llega el producto pueden transcurrir 4 meses», detalló.
En cuanto a la leche en polvo, Roger Figueroa, presidente ejecutivo de la Cámara Venezolana de Industrias Lácteas, afirmó que el gobierno, único importador, provee a la industria de 8.000 toneladas al mes, cuando lo que se necesita son 17.000 para cubrir el mercado. Al mismo tiempo mantiene un costoso subsidio para sostener el precio. «En el mercado internacional la tonelada de leche cuesta 5.300 dólares, y en Venezuela se vende en 3.800 dólares. La diferencia la pone el gobierno», afirmó.
Indicó que el precio de la leche cruda, principal insumo de la industria láctea, se ha duplicado en seis meses: pasó de 10 bolívares a 20 bolívares, por lo que el costo del producto final es muy superior al regulado. «Es prácticamente imposible producir quesos industriales», afirmó.
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