Robert Romaso, presidente del sindicato de Conaprole y dirigente de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) dijo a El País que por ahora las medidas se mantienen y que analizarán el rumbo del conflicto. La Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) está reunida a ésta hora en asamblea.
Más temprano, antes de reunirse con la patronal, Romaso había asegurado que si no se llega a buen puerto en las negociaciones con la empresa el sindicato va a «tomar medidas fuertes». «Una cosa es negociar, otra cosa es ensuciar que es lo que está haciendo la patronal cambiando los temas que se discuten», acusó el sindicalista en referencia al anuncio de Conaprole de que tiraría 37.000 kilos de crema de leche.
Romaso acusó a la empresa esta mañana de querer «desenfocar la atención del conflicto y aparecer como víctima» con el anuncio de que debería tirar 37 toneladas de materia prima para la realización de manteca . «Si la empresa quiere tirar materia prima, problema de ellos. Cuando uno empieza un conflicto nunca sabe cuándo puede terminar», dijo.
Sin embargo, el director de Higiene de la Intendencia de Florida, Daniel Do Santos, dijo a El País que ayer Conaprole pidió al laboratorio de bromatología municipal que estudiara el producto, tras lo cual se corroboró que no estaba en condiciones y la firma decidió desecharlo.
Conaprole aún no realizó el vertido de la crema de leche. Según explicaron fuentes de la firma, pasó tanto tiempo que el producto se espesó y no puede ser sacado de los camiones. De todas maneras, se están realizando tareas para solucionar el problema técnico. «Van a empezar con el vertido esta tarde», aseguró el jerarca municipal.
Será en un predio que tiene la cooperativa en una zona llamada peaje Arias. El lugar cuenta con la habilitación de Dinama. Cada tonelada del producto vale US$ 2.000, es decir, que se pierden US$ 74.000 en total.
El País Digital