El presidente de la Cámara de la Industria Láctea (CILU) y gerente general de Conaprole, Ruben Núñez, dijo a Blasina y Asociados que en un periodo no mucho mayor al cierre de este ejercicio podría comenzar a percibirse una recuperación de la demanda y de los precios de los lácteos.
“Más que un tema de precio, el tema es de restablecer los flujos comerciales. Esa debe ser la preocupación de todos los actores de la cadena láctea”, indicó.
Altos stocks mundiales y una demanda muy débil -a pesar de los bajos precios- son las principales variables que están condicionando el mercado mundial de lácteos. “El tema es saber cuánto tiempo más va a mantenerse esta situación tan compleja de mercados internacionales. Nosotros esperamos que en un plazo no mucho mayor al cierre de este ejercicio empecemos a ver una recuperación de la demanda y de los precios”, sostuvo.
Para Núñez, tanto los productores como la industria local están capacitados para pasar “estas aguas turbulentas” por ser un sector que tiene una cadena integrada “muy sólida y muy eficiente”.
“Lo de Venezuela es preocupante”
Al día de hoy la entrega de licencias, autorización de divisas y apertura de cartas de crédito están en cero, informó a Blasina y Asociados una fuente de la industria quesera. El canciller uruguayo Rodolfo Nin Novoa dijo en rueda de prensa, en el marco del Foro Anual de INALE, que desde el gobierno se está avanzando en las negociaciones de intercambio de petróleo por alimentos. Por ahora, desde la industria quesera las expectativas no son tan optimistas.
El titular de la CILU, Ruben Núñez remarcó que el problema con Venezuela no escapa a la circunstancia global del mercado. Todos los países productores de petróleo están recibiendo la mitad de los ingresos que recibían hace un año. Con la mitad de los ingresos -por más de que los precios de los lácteos también han caído- se han generado dificultades de comercialización.
Según explicó, algo similar a los de Venezuela pasa en Rusia y en China. Incluso Argelia enfrenta una situación vulnerable por la baja en el precio del curdo. Si bien los volúmenes exportados a ese destino son grandes, los niveles de precios a los que se está cotizando son muy bajos.
“Lo de Venezuela es preocupante porque, sobre todo para la parte de quesos, la mayoría de las industrias de la CILU a vuelcan sus productos en el mercado venezolano, eso es una dificultad grande. Pero de alguna manera la oferta y la demanda se calzarán de nuevo en otro punto de equilibrio y en otro momento. El problema es que no sabemos bien cuándo y eso va a estar asociado a la caída drástica de stocks”, concluyó.