El productor dijo que el buen momento que vive el sector lechero “es coyuntural”
El exdirector de Conaprole y productor lechero, Álvaro Lapido, dijo que de un margen bruto de US$ 500 por hectárea “solo US$ 50 van para el bolsillo” del tambero, advirtió que el buen momento de la lechería “es coyuntural” y alertó que “no es tiempo de endeudarse”.
Lapido rompió un silencio que había mantenido durante tres años, desde que renunció al Directorio de Conaprole por discrepancias con el manejo de un conflicto sindical.
En este tiempo “he estado en el tambo, sin contacto (con el mundo exterior) y preocupado por la suba de costos”, afirmó.
El exdirector de la cooperativa láctea disertó el jueves de noche sobre “Precios buenos, costos altos”. El rol clave de la gestión, como parte del ciclo Agro en Foco organizado por la consultora Blasina y Asociados, el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y El Observador en la Sociedad de Productores de Leche de Florida.
Lapido opinó que “el bueno momento de la lechería es coyuntural, no estructural” y alertó que “los malos momentos van a venir”. Luego mostró que los tamberos están destinando el 40% del margen bruto a inversiones, otro 20% a amortizaciones, 15% a retener vientres y otro porcentaje al pago de renta e intereses. “De un margen bruto de US$ 500 por hectárea, solo US$ 50 van para el bolsillo”, remarcó.
El exdirector de Conaprole recordó que promovió el ahorro “sin suerte” y lamentó que esa medida esté “fuera del esquema de los productores”. Advirtió que “cuando uno debe plata es esclavo” de ese compromiso y volvió a pedir a los tamberos “reservar alguna parte del gasto ordinario”.
Lapido se preguntó con qué autoridad podía hablar y respondió que su trayectoria era como un evento transgénico apilado: tolerante a eventos climáticos adversos; resistente a endeudamientos financieros moderados; tolerante a fuertes variaciones de precios de commodities; y resistente a las adversidades que enfrentan sucesiones familiares.
Comentó que las carpetas de más de 70 productores que remiten a Conaprole y se analizan “dan márgenes buenos” en el último Ejercicio 2012/2013 y se preguntó “por qué entonces hay iliquidez” en el sector lechero. Lapido dijo que está “preocupado” porque el país “está desacelerándose y el crecimiento del gasto público es enorme y cae la recaudación” y remarcó: “El Producto Interno Bruto (PIB) cae y el gasto sube”.
El precio de la leche
“El precio de la leche es bueno, pero los costos suben día a día y el margen es cada vez menor”, dijo el productor, y agregó que como el precio de la tierra sube “la gente no se puede expandir y opta por ponerle un segundo piso al campo”, es decir, crecer de manera vertical.
El crecimiento vertical conlleva “dolores”, cambios en la dotación, infraestructura, equipamiento, mano de obra y financiamiento, reseñó Lapido , y alertó que en ese proceso “debemos de los técnicos y de la excesiva oferta de paquetes tecnológicos de empresas privadas, en especial de insumos”.
Si bien aclaró que no está en contra de la tecnología, Lapido dijo que “hay que saber hasta dónde llegar con lo que nos ofrecen. Yo quiero que los tamberos vivan bien, que no sufran ni corran la liebre (y) es peligroso ser esclavo de la tecnología”.
Lapido aseguró que “hay gente que está pensando en encerrar ganado y eso requiere mucha inversión”, y se preguntó qué pasará “si retrocedemos en el precio” de la leche, que está en un promedio de US$ 0,40 el litro. También alertó que si los precios de los lácteos suben mucho está el peligro de “que aparezcan sustitutos más baratos, así como puede entrar gente nueva al negocio”.
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