Conaprole evalúa el precio que fijará para las remisiones a partir de agosto, en un marco de creciente expectativa y con ajustes a la baja en los precios internacionales. Para explicar cuál es la situación de la cooperativa y qué es lo que se puede esperar la directiva convocó a los productores a distintas localidades de la cuenca. Consultado sobre el estado de ánimo de los remitentes, Eduardo Viera, presidente de la Asociación de Productores de Leche (ANPL), señaló a Tiempo de Cambio que “si bien están expectantes, están tranquilos” ya que la cooperativa les aseguró el precio hasta el 31 de julio. De esa fecha en adelante no se les adelantó qué podía pasar con el precio, ya que por ahora están monitoreando la situación para ver qué pasa a nivel internacional. Sí se les comunicó que no habrá reliquidación en julio y que tampoco se extenderá la bonificación invernal más allá de este mes. Una posibilidad que se está estudiando es utilizar el fondo anti cíclico para amortiguar la caída de precios y ayudar así a sostener los precios al productor. El monto de este fondo es algo más de US$ 11 millones, señaló Viera.
La decisión de Conaprole es largamente esperada ya que, mientras otras empresas han venido ajustando sus precios a la baja, la cooperativa los mantuvo y se especula con la imposibilidad de que pueda seguir haciéndolo, sobre todo teniendo en cuenta los altos volúmenes que se esperan para la primavera.
Ya son varias las empresas que han venido recortando precios al productor, a las que también se sumó Ecolat. Esta empresa pagará un precio que rondará de $ 6,80 a $ 7 para la remisión de julio e irá analizando mes a mes la liquidación. Se espera que la evolución de los valores para la primavera sea de precios a la baja, en consonancia con los precios internacionales y con los meses pico de producción en Nueva Zelanda, dijeron fuentes a Conexión. Si bien señalaron que no hay problemas de colocación, los negocios se hacen a menores precios y, en algunos casos de contratos que se habían hecho a precios anteriores a las últimas caídas, hubo que renegociar los valores. De todas formas existe optimismo en que los precios van a tener que subir, según consignan distintos analistas y consultoras internacionales, una vez que se liquiden los altos stocks por la muy buena zafra 2011/2012 en los países exportadores.
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