Más de 70 mil litros de leche por día han tenido que tirar productores de Tolosita, debido a que las vacas lecheras se contaminaron las ubres al cruzar el río contaminado con gasolina desde el pasado sábado 5 de septiembre, lo que representa una pérdida de alrededor de 46 mil 800 pesos, por día, señaló el dirigente de los productores de leche de este municipio de Matías Romero, en el Istmo de Tehuantepec, Jaime García.
El productor indicó que no le han podido entregar el producto a la empresa Nestlé ante el temor de que se encuentre contaminado, por lo que por el momento el ganado se encuentra encerrado en los distintos potreros sin comer ni beber agua, debido a la contaminación con gasolina.
En este sentido, refirió que ayer sostuvieron una reunión con representantes de la paraestatal de Petróleos Mexicanos (Pemex), pero su representante, Rogelio Ríos, les indicó que no tiene ningún poder para resolver el problema; asimismo, señaló que llevaron un médico que no realizó ninguna revisión ni a los animales ni al producto para descartar o confirmar si se encuentra contaminada o no.
“Pemex vino a la comunidad y nada más nos trajo puras promesas; se fueron sin darnos ninguna solución, ni del agua, ni del alimento. Nosotros no sabemos qué hacer, ya tenemos dos días sin sacar a los animales a pastar; no tenemos con que llevarles de beber y de dónde sacamos tanto zacate de un día para otro”, afirmó.
Expuso que los ganaderos se encuentran desesperados pues no hay recurso para rentar potreros, si todos los de la zona se dedican a lo mismo y pasan por la misma situación.
“Tenemos miedo que se mueran nuestras reses, por la falta de agua y alimento. Imagínese, la muerte de nuestras vacas, el desperdicio de leche, la falta de venta, y hay que pagarle a los peones de los ranchos, que muchos de ellos se quedaran temporalmente sin empleo”, detalló.
Por su parte, la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), exigió a Petróleos Mexicanos y al gobierno federal atiendan a los afectados por los derrames constantes de hidrocarburos que han afectado gravemente, por años, los ecosistemas de Oaxaca, y denunciaron un ecocidio ocurrido este fin de semana, tras dos nuevas fugas, lo que afecta a campesinos y productores de ganado.
En un comunicado, la organización que aglutina a grupos indígenas, denunció que el terreno del señor Víctor Castañón, ejidatario de Mogoñe Viejo, fue afectado por el derrame que ocasionó la formación de una laguna de hidrocarburo de 600 metros cuadrados, en su terreno.
Por lo que se estima que ganaderos de la región han perdido en las últimas horas hasta 70 mil litros de leche pues las ubres de las vacas que pastaban en las márgenes del río se contaminaron con el hidrocarburo, al igual que la carne de las reses. Además de que los animales podrían contaminar los campos.
La fuga, que afectó 5 kilómetros del Arroyo 60, que desemboca en el río Juñapan, provocó graves daños ambientales, además de las afectaciones económicas en cosechas, caballos y ganado bovino de los campesinos.
La Ucizoni exigió a Pemex la reparación de los daños económicos y ambientales, indemnizando de manera justa a los campesinos y mitigando los daños ambientales a través de un programa de restauración ambiental.
“Exigimos a la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y Protección Ambiental (ASEA) su intervención directa para frenar las graves afectaciones a nuestra Madre Tierra”, refirieron.
Por su parte, el delegado de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa), Nereo García García, anunció que el organismo abrió un expediente de investigación por el derrame de cinco mil litros de hidrocarburos derramados sobre una laguna y un canal de agua, de dos comunidades indígenas del Istmo de Tehuantepec, causado por dos tomas clandestinas.
De acuerdo al funcionario, como medida de seguridad se suspendió temporalmente la operación del ducto dañado.
El delegado de la Profepa dio a conocer que un cuerpo de inspectores y técnicos especialistas acudieron a verificar el presunto daño ambiental generado, y que fue reportado por los vecinos de dos comunidades de la zona, quienes incluso impidieron el paso al personal de Pemex argumentando que se trataba de ocultar y minimizar los daños ambientales provocados.
Dijo que de manera preliminar se calcula que se fugaron del poliducto aproximadamente 90 mil litros del hidrocarburo, principalmente gasolina.
Sin embargo, el vocero de la refinería “Antonio Dovalí Jaime”, ubicada en el Puerto de Salina Cruz, Cipriano Zamudio Demetrio, informó que el accidente generado por los dos derrames de combustible fue controlado por personal de ductos de la paraestatal.
Detalló que en ambos casos sólo se vertió una ligera emanación de producto que quedó confinado en el terreno aledaño; sin embargo, para evitar riesgos en la zona impactada por el derrame, se dispersó espuma mecánica.
Indicó que aun así, técnicos especializados de la paraestatal llevaron a cabo los trabajos para eliminar los artefactos colocados ilícitamente, y posteriormente realizaron las labores de limpieza y saneamiento.
Uno de estos hechos ocurrió en el poliducto Minatitlán-Salina Cruz, y otro más en una laguna ubicada en las inmediaciones de los municipios de Matías Romero y San Juan Guichicovi.
Los sitios donde se reportaron las afectaciones fueron en poblado Vixidu, municipio de San Juan Guichicovi, y la comunidad de Tolosita, del municipio de Matías Romero, donde el combustible afectó el canal de agua.
Por otra parte, luego que se registraran los dos derrames de combustibles en la región del Istmo de Tehuantepec, por la ordeña de los ductos que van de Minatitlán a Veracruz, ambientalistas oaxaqueños demandaron la intervención de la Profepa.
“Es urgente que el gobierno federal sancione a Petróleos Mexicanos. No es la primera vez que tenemos problemas de contaminación en el tramo de Palomares a Matías Romero; también de Salina Cruz a Tehuantepec. Es urgente que intervengan las autoridades de la Profepa. El derrame de crudo en
Salina Cruz, hace 3 años, quedó impune”, dijo la ecologista Carmelita García.
Coincidió con la ambientalista Karla Pérez en el sentido de que tanta impunidad debe sancionarse, pues no sólo se trata de derrames por ordeñas, sino también por omisiones de Pemex y por volcaduras de camiones cisternas que transportan combustibles.
“Al final, las autoridades estatales declararon que los daños no fueron tan graves. Sin embargo, los resultados se verán en el corto plazo. Nunca los derrames de combustible se pueden revertir”, apuntó.
De acuerdo con Abigaíl Pacheco Pascual, el Congreso local debe actuar porque hasta ahora los legisladores locales se han visto lentos a la hora de exigir que se castigue a los responsables de la contaminación.
“Cuando menos la anterior legislatura acudió a Salina Cruz y exigió a Pemex que se diseñara un programa para evitar fugas y derrames de combustible. Sin embargo, la falta de seguimiento a estos temas hace que en Pemex continúe propiciándose la contaminación”, señaló.
En la víspera, se informó que a raíz de estos dos derrames de combustible en la región del Istmo de Tehuantepec, también se afectó un arroyo con mortandad de peces y aves en cuando menos 18 ranchos de la región.
El reporte preliminar indica que el segundo derrame de gasolina, registrado ayer en Matías Romero, ocurrió en Tolosita, donde se contaminaron más de 5 kilómetros del arroyo conocido como El 60.
En la zona, según el reporte oficial, se observan peces y aves que murieron por la contaminación.
Es tan grave la contaminación que más de 18 ranchos cercanos están afectados por la contaminación del arroyo.
De acuerdo con las autoridades de Protección Civil, el derrame de combustible no amerita evacuación y se realizan trabajos de limpieza en la zona.
Al lugar no llegó la Profepa, solamente Pemex, así como autoridades municipales y estatales de Protección Civil.
En tanto, el pasado domingo, Pemex recuperó más de 48 mil litros de gasolina en Boca del Monte, donde el sábado se registró otro derrame de más de 900 mil litros de gasolina.
Fuente: TIEMPO
http://www.adiariooax.com