Aun cuando no la tienen clasificada como pobreza extrema, pues la gente tiene ingresos por jornada laboral, el gerente estatal de Liconsa, Adrián Ramírez Maya, refirió que en la Capital tamaulipeca “se concentra el mayor número de familias pobres y que reciben el beneficio de leche subsidiada”.
Explicó que el crecimiento de la pobreza en la localidad es multifactorial, pues por una parte hay gente que tiene un trabajo y del cual recibe una remuneración económica, por otro lado hay familias con más de cinco integrantes y en donde solo una persona trabaja, pero hay otro sector, dijo, “donde en una familia hay muchos niños, entonces la situación alimentaria se complica en ese entorno, es ahí donde entramos nosotros”.
El gerente estatal de Liconsa dijo que a la fecha tienen registrados 47 mil beneficiarios y la tendencia es a la alza, pues estima que para diciembre el padrón de familias llegue a los 49 mil, sin embargo, expuso, hasta el momento se han dado de baja a dos mil personas, una, porque las reglas de operación señalan que no pueden duplicar los apoyos federales, o simplemente porque el niño que recibe la leche subsidiada ya creció y no necesita del apoyo.
Expuso que en el caso de las personas a las que se les retiró el apoyo, es porque no pueden estar inscritos en dos programas federales y optan por quedarse inscritas en los esquemas de “Oportunidades” o “70 y Más”, aquí, explicó Ramírez Maya, en promedio se dan de baja entre 200 a 300 personas por mes.
Admitió también que se dan casos en donde el beneficio se pierde, toda vez que la persona deja de ir por su leche subsidiada y simplemente es sacada del padrón, que a la fecha es de 45 mil 625 beneficiarios en Tamaulipas.
http://eldiariodevictoria.com.mx