La OPL asegura que 50 granjas de vacuno de leche en León se plantean cerrar y que la situación es extrema en 12 de éstas.
Un mes después del final de la cuota láctea la Organización de Productores de Leche (OPL)pone la espada de Damocles del cierre sobre 50 explotaciones de vacuno de leche de la provincia a consecuencia de la caída de los precios y del aumento del precio de la alimentación de las reses. Según su portavoz nacional, José María Álvarez, este medio centenar «estaría planteándose el cierre», aunque la situación resulta especialmente crítica en una doce de granjas.
León es la provincia con más peso en la producción de leche de vaca de la Comunidad autónoma, con 215.000 toneladas anuales (El 27% del total autonómico), procedentes de 522 explotaciones, que albergan 25.000 cabezas de ganado.
Sin embargo, en León y en el conjunto de la Comunidad autónoma, además de en Andalucía, la situación, «dentro de lo malo, es la más tranquila», reconoce Álvarez, que sitúa Galicia y Cantabria en el ojo del huracán —la prensa habla de 4.000 explotaciones— del que se salva Asturias «por el 50% que tiene Central Lechera Asturiana».
Con respecto a la contratación al amparo del paquete lácteo, la OPL señala que en estos momentos «ni el ganadero ni la industria están a gusto con el contrato de un año. La patronal láctea, Fenil, ya anunció que llevaría al Supremo esta medida y el ganadero está llevando la renuncia al contrato porque no le interesa firmar un contrato de un año en estos momentos, con el precio más bajo del año. Firmarían perdiendo dinero».
Los precios en la provincia se sitúan en la actualidad en 3,29 céntimos de euros por litro para las ganaderías que venden 80.000 litros al mes, mientras que los ganaderos con peor fortuna se mueven entre los 27 y 26 céntimos, apunta.
La OPL no tiene constancia de la existencia en la provincia de contratos fraudulentos —UPA en Galicia ha llevado al ministerio más de un millar que así considera—, aunque «hay muchos ganaderos sin contrato, otros in precio y muchos que no saben cuándo cobrarán». En cualquier caso, el sector aún se encuentra en el periodo de moratoria de adaptación de los acuerdos entre la industria y los productores a las novedades del paquete lácteo.
Con respecto al control del Ministerio de Agricultura sobre el sector lácteo, Álvarez apunta que la estrategia «es que no quede un sólo litro de leche en el campo. Pero el ministerio no habla de precios y si recoger supone hacerlo a precio de leche en polvo, a 20 céntimos el litro… No se trata sólo de garantizar la recogida, sino, también, de cubrir los costes de producción y de ganarse el sustento», apunta el portavoz de la organización de ganaderos, que añade que la subida de la alimentación animal eleva los costes de producción mientras el precio de la leche cae.
En medio de los embates de la producción sin cuotas, Álvarez busca «¿dónde están las oportunidades que nos iba a traer esta nueva situación y que nos vendieron las administraciones central y autonómica? Porque antes el ganadero tenía una cuota que cubrir y ahora es la industria la que decide lo que éste produce».
Habrá supertasa
Por otro lado, el Fondo Español de Garantía Agraria (Fega) ha adelantado que, finalmente, se superará la cuota en la última campaña con tope. La previsión es que la multa ascienda a unos 11 millones de euros, después de que los datos provisionales de la campaña arrojen un exceso de 40.000 toneladas.
El Fega apunta que habrá que tener en cuenta las actualizaciones y trasvases de cuota y apunta a que son 150 ganaderos, aproximadamente, los afectados. El importe final se podrán pagar en tres plazos anuales.
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