La grave crisis de precios que atraviesa el sector lácteo gallego desencadenó ayer una reunión del Gobierno central y de la Xunta con el sector en Santiago.
La grave crisis de precios que atraviesa el sector lácteo gallego desencadenó ayer una reunión del Gobierno central y de la Xunta con el sector en Santiago. Y del encuentro salieron dos nuevas medidas para mejorar la situación financiera de las explotaciones, tal y como anunció la conselleira, Rosa Quintana. Aún pendientes de publicarse en el DOG, la primera se centrará en procurar una moratoria de dos años en los préstamos que tienen concedido los ganaderos a interés cero para modernizar sus explotaciones. Los beneficiarios potenciales, según la Xunta, son 1.100 titulares de explotaciones y el importe del capital aplazado se situará en los 51 millones de euros.
La segunda iniciativa pasa por dotar de liquidez a las granjas mediante la refinanciación de pasivos y préstamos para el circulante. «Isto permitirá o acceso de ata 10 millóns de euros de capital circulante ás explotacións galegas», informó ayer el Gobierno gallego.
Reacciones
Javier Iglesias, portavoz de ganadería de Unións Agrarias, calificó ayer de «positivas» las nuevas medidas, pero aventuró que serán inútiles en un escenario como el actual. «O problema está nos prezos porque hai un escenario de colapso económico de 3.000 explotacións de leite que neste momento están a vender o leite nun arco de prezos que vai dende 0,18 euros o litro a 0,23», explicó.
En este escenario, el sector ganadero gallego apuesta por un acuerdo como el firmado en Francia, donde la cadena de valor ha acordado una subida de cuatro céntimos de euro en el lineal de venta, incremento que repercutirá sobre las industrias y sobre los ganaderos. Tras participar en la reunión en Santiago, el secretario general de Agricultura del Gobierno central, Carlos Cabanas, aseguró ayer se ha preguntado a las autoridades de Competencia si se puede avanzar en esa línea, pero mostró sus dudas de que ese camino no contravenga la normativa.
El responsable del Ejecutivo central si apostó porque la industria se comprometa a recoger la materia prima en el campo a un precio que «sea sostenible».
http://www.lavozdegalicia.es