¡Qué viva Colombia!Por estos días entré como muchos cucuteños a refrescarme ¡por aquello del clima! en uno de esos centros comerciales donde uno lo encuentra todo muy bien exhibido, y hasta compra lo que no necesita, pues bien, estando allí me dio por hacer “inteligencia de mercado”, o como dicen los que cobran en dólares, “Benchmark” en una tienda por departamentos.
Escogí por razones de mi oficio de ganadero averiguar con que productos compite la leche, y lo primero que salta a la vista es el incremento al valor de lo que se compra, solo por concepto de su presentación como botellas de vidrio o plásticas, bolsas o cartones multicolores, impulsadoras muy bien trajeadas que se pelean los clientes. Entonces para establecer comparaciones validas entre bebidas gaseosas, agua en botella y leche en bolsa, comparé la presentación de un litro de todas ellas, y miren lo que encontré:
BEBIDAS GASEOSAS. Las hay de todo tipo y tamaño. Ingredientes: agua, dulce, colores artificiales y gas carbónico. No mucho verdad. Valor promedio 2.500 pesos
AGUA EN BOTELLA. Aquí la competencia también es intensa. Todos los nombres sugieren que proceden de lo más alto y puro de nuestras cordilleras andinas, cuando uno sabe que sus orígenes están en las tuberías de las grandes fábricas donde les incluyen todos los químicos hasta ahora inventados. Valor promedio 2.200 pesos.
LECHE EN BOLSA. Bueno, es justo reconocer que mis colegas los ganaderos también han aprendido a vender. Llamativos estampados con vaquitas que no pueden con sus ubres y no sé porque todas son blancas y negras como si no hubiera otras razas lecheras. Por razones de espacio no menciono el contenido de nutrientes que este maravilloso alimento le aporta a quienes lo consumen. Muchos de nosotros fue lo único que recibimos hasta los tres meses y miren el Camaján que soy. Valor promedio 1.500 pesos.
Las conclusiones de este improvisado pero llamativo estudio nos invitan a pensar que hay algo que no anda bien, y ¡ojo! no estoy en contra de que la leche llegue a comparativamente bajos precios al consumidor, no, lo que no es equitativo es que a los casi 400.000 pequeños productores de leche de este país, nos pongan a producir a perdida un alimento que debía tener todas las condiciones de estimulo en política pública, y como tal, llegar a los sectores vulnerables de la población, principalmente la infantil.
La producción de leche es mucho más compleja que envasar agua sola, o con gas y dulce. Múltiples razones así lo establecen, y tan solo su aporte a la estabilidad social del campo, es de por sí razón suficiente para que en la mayoría de países, la cadena láctea disponga de un tratamiento especial, que incluye incentivos de toda índole a quienes la producen. En los EE-UU conocen bien esta particularidad, y en el TLC firmado con Colombia, dejaron bien claro que los subsidios ofrecidos a sus productores tendrán un nuevo y atractivo mercado………46 millones de colombianos.
En ese orden de ideas, es muy posible que como lo demuestra mi improvisado estudio, la gaseosa y el agua en botella sigan subiendo, mientras la bolsa de leche continuará costando los mismos 1.500 pesitos, la diferencia está en que vendrá de gringolandia y los productores nacionales quedaremos como el ternero: “Jodidos”.
Al oído: El TLC con la Unión Europea es aun más lesivo a nuestros intereses. Allá no hay garrapata, nuche, tábano o culebra mata ganado y las otrora comunes cántaras cuando mucho se volvieron piezas de museo, pues todo lo hacen las maquinas, y al final el maravilloso liquido viaja en lactoductos, aquí en cambio nos toca en mula, burro o carreta, y cuando se corta, queso de boruga, o cuajada con melao, éste fabricado con la ayuda de otro pariente criollo: la panela.
Se sufre, pero se goza. Apuesto que allá no ponen vallenatos o música llanera a buen volumen a las dos de la mañana para que las vaquitas den toda su leche. ¡Que viva Colombia!
http://www.laopinion.com.co