Sector lácteo de Nicaragua aún no ve normalidad

Canislac considera que caída del 30 por ciento en las exportaciones es “irrecuperable".
Share on twitter
Share on facebook
Share on linkedin
Share on whatsapp
Share on email

Tras contabilizar la pérdida de cerca de 18 millones de córdobas durante la fase más aguda de crisis, la caída de 30 por ciento en el volumen exportado por la reducción de mercados y que a esas afectaciones ahora se suma la escasez de financiamiento, dirigentes del sector lácteo admiten que no podrán alcanzar la meta de crecimiento del 5 por ciento proyectada para este año.
“De momento se está comenzando a generar cierta estabilización, hemos tratado de recuperar nuestros clientes y nuestros mercados. Incluso, algunas plantas están haciendo esfuerzos por entrar a otros mercados fuera de la región y eso está generando cierto dinamismo. Pero recuperar las exportaciones para alcanzar las proyecciones que apuntábamos antes de la crisis, que era crecer 5 por ciento por encima de los 178 millones de dólares que exportamos el año pasado, es imposible. Ni siquiera vamos a llegar a los 178 millones”, asegura Óscar López, director ejecutivo de la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo (Canislac). El sector aún está calculando las nuevas proyecciones.
López explica que “durante lo más fuerte de la crisis hubo afectaciones en la actividad ganadera de todo el país y aunque no es fácil recopilar la información, pudimos determinar que en algunas zonas de Santo Tomás (Chontales), El Rama y Nueva Guinea (Región Autónoma de la Costa Caribe Sur) el acopio estuvo en cero durante 27 días y las cinco plantas que funcionan en esa zona acopian en promedio setenta mil litros de leche diariamente”.
En esos días, en promedio estas plantas pagaban 9.25 córdobas por litro, por lo que solo en esa zona los productores dejaron de captar unos 17.48 millones de córdobas por la cantidad de leche que no acopiaron.
Dinero es usado para pagar gastos fijos
El problema, según Canislac, es que los recursos que se obtienen diariamente por la venta de leche son usados por los ganaderos para cubrir los pagos fijos que tienen que realizar en las fincas. “Entonces hay un gran retraso en el economía rural producto de la falta de circulación de estos recursos. La falta de estos recursos provocó también que muchos productores no pudieran cumplir sus compromisos crediticios y que cayeran en mora”, aseguró López. Añadió que eso también evitó que se realizaran las actividades que tradicionalmente se efectúan previo al inicio de la temporada lluviosa, lo que afecta directamente la calidad de la leche.
Adicionalmente, según Canislac, las plantas que no cerraron operaciones por completo, posteriormente también se vieron afectadas por problemas de mercado. Estas acopiaban por día hasta el 25 por ciento del volumen de lo normal. Ante los problemas de movilización por los tranques, transformaban toda esa leche en queso de exportación y lo almacenaron en espera de que se restablecieran las condiciones para enviarlo al mercado externo, en su mayoría a El Salvador, que es el principal comprador del queso nicaragüense.
Eso, según López, “provocó que en un momento dado algunas plantas tuvieran que paralizar operaciones, porque ya ni tenían capacidad de almacenamiento; y ante el incumplimiento de envíos, desabastecimiento en el mercado salvadoreño. Esto fue capitalizado por plantas hondureñas y desafortunadamente en ese momento también se afianzó el contrabando”.
Saturaron mercados
Luego, a finales de julio, cuando las condiciones de movilización en las vías se normalizaron, las plantas sacaron todo el queso que tenían almacenado y abarrotaron varios mercados, incluido el salvadoreño. “Esto provocó el incremento de regulaciones por parte de ese mercado para impedir un sobreabastecimiento, pero también la caída del precio, detalló López.
Ante todas estas situaciones, el volumen de las exportaciones registró en los últimos meses una caída del 30 por ciento que, según Canislac, es “irrecuperable” porque hasta ahora no se ha logrado una total recuperación, el sector trabaja al 90 por ciento de su capacidad.
Según el reporte del Centro de Trámites de las Exportaciones (Cetrex), entre el 1 de enero y el 31 de agosto de este año se enviaron al exterior 38,589 toneladas de leche, queso y otros derivados lácteos, por las que el país obtuvo 107.31 millones de dólares. En el mismo periodo del año pasado se enviaron al exterior 56,471 toneladas de productos por un valor de 117.90 millones de dólares.
Terneros más gordos
Dado que durante la fase más cruenta de la crisis sociopolítica que enfrenta el país desde hace 175 días no existían las condiciones para que las plantas acopiaran la producción láctea, para reducir las pérdidas los ganaderos optaron por no ordeñar sus vacas, las soltaron y dejaron que los terneros mamaran todo esta producción.
“Esto en el mediano o largo plazo podría beneficiar la producción de carne. Se espera que estos terneros tengan una mejor ganancia de peso y que alcancen el establecido por los mataderos para el sacrificio, en un plazo menor al promedio”, explicó Óscar López, director ejecutivo de la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo (Canislac).

Mirá También

Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

Te puede interesar

Notas
Relacionadas