El precio de la leche sigue a la baja en Galicia y acumula ya siete meses de caídas o, lo que es lo mismo, todo el presente año. El último mes del que existen datos es julio y la media ponderada en la comunidad fue de 30,3 céntimos por litro, la más baja desde hace un año, igualando la cotización registrada en agosto de 2017. Los precios declarados por los compradores oscilan entre los 26,94 céntimos de los del estrato más bajo, con menos de 100 toneladas, hasta los 31,08 de las explotaciones que rebasan las 700.
Los ganaderos gallegos perciben casi 2 céntimos menos en cada litro de lo que obtenían al cierre del año pasado. Los 32,2 céntimos que marcaron el importe medio de diciembre constituyen la cantidad más elevada del último año, pues en enero quedó en 31,7 céntimos, que fueron mermando en 0,1 y 0,2 céntimos en los dos meses siguientes, mientras que en abril estaba ya en 30,8 céntimos, que serían 30,5 en mayo, con bajadas de 0,1 céntimos en junio y julio.
Galicia sale mal parada, una vez más, de la comparativa con otras comunidades autónomas. Dejando a un lado los 44,9 céntimos que cobran los ganaderos canarios, la leche más cara está en Asturias y País Vasco, con 33,6 y 33,3 céntimos por litro, respectivamente, lo que sitúa a ambos territorios por encima de la media estatal, que fue de 31,2 en julio. Solo los ganaderos de Cantabria (30,1 céntimos) están por debajo de los gallegos.
En lo que va de año, en Galicia se mantienen entre 50 y 51 compradores con leche declarada, superada por los 58 de Cataluña en julio, para hacer un total de 325 en toda España. La leche declarada ha crecido en julio en 2.000 toneladas en Galicia, llegando a las 180.000, si bien la leche total producida en la comunidad gallega roza las 237.000 toneladas -solo superada el último año por las 243.000 de mayo-, mientras que el Estado gana 4.000 el último mes y totaliza 605.000. La producción gallega equivale al 38% del total estatal, seguida de Castilla y León (12,6%) y Cataluña (10,7%).