‘Vienen años de vacas gordas para la ganadería colombiana’

Una nueva federación ya agremia a más de 70.000 ganaderos en el país.
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Una nueva federación ya agremia a más de 70.000 ganaderos en el país.
El precio de las vacunas para mantener sano el hato ganadero en Colombia, en el que cerca de 450.000 familias encuentran su sustento, bajó 240 pesos por dosis este año. Pasó de 1.150 a 910 pesos.
Esto ocurrió porque desde enero del 2016 ha sido el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural el que ha administrado la cuenta parafiscal de carne y leche del país, cuyo recaudo oscila entre los 80.000 y 100.000 millones de pesos anuales.
Este monto, que se genera a partir de un cobro que se hace por cada animal sacrificado y cada litro de leche procesado, hasta el 2015 fue dirigido por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), a través del Fondo Nacional del Ganado, ahora en liquidación.
La ley determina que de la cuenta, cerca de un 40 por ciento, es decir entre 35.000 y 40.000 millones de pesos, tiene una asignación específica al componente de salud animal, principalmente, en la vacunación: contra la fiebre aftosa y la brucelosis bovina.
El gerente general del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Luis Humberto Martínez Lacouture, aseguró que en el primer ciclo de vacunación de este año “se alcanzó una cobertura del 96,7 por ciento en aftosa y de 97,1 en brucelosis. Se hizo la tarea, aumentamos la cobertura y se culminó con éxito; en ello, reconocemos el esfuerzo de todos los ganaderos del país”.
Líderes del sector aplauden la baja de los precios
Ricardo Sánchez, presidente de la Unión Nacional de Asociaciones Ganaderas de Colombia (Unaga), aseguró que “cualquier reducción en costos de producción incide de manera importante en el ejercicio. Es algo que se recibe de muy buena manera”.
Sánchez reconoce que este momento de transición implica algunos temas pendientes. “El Gobierno ha direccionado el gasto en lo que corresponde a la salud animal, pero hay otros componentes como las cadenas productivas y el fomento al consumo”.
Sin embargo, en cuanto a la vacunación, los ganaderos señalan que, sumado a la baja de precios, mejoró la cobertura.
“En Casanare tenemos un millón ochocientas mil cabezas, un poco más de eso –explicó María Lucila Reyes, del Comité de Ganaderos del Casanare–. Sí nos aumentaron el número de vacunadores. Esto ha sido un beneficio muy grande porque, además, ahora tenemos mayor disponibilidad de vacunas”.
El segundo ciclo, que se inició el pasado 8 de noviembre y acabará el 22 de este mes, también va por buen camino. Tal y como sucedió en el primero, el Ministerio de Agricultura contará con 3.250 vacunadores y 80 programadores.
Además de los beneficios en el tema de la vacunación, la nueva gestión de la cuenta parafiscal por parte del Ministerio de Agricultura también redujo los gastos administrativos, pasando de 1.160 millones de pesos a solo 287.000 millones de pesos mensuales. Y también hubo un ahorro de 300 millones de pesos por compra de insumos en las vacunas.
Nuevos aires ganaderos
A finales del mes pasado, el presidente Juan Manuel Santos le dio su respaldo a la Nueva Federación Ganadera de Colombia (NFG), creada en septiembre de este año.
Alfredo García, líder de la Federación Ganadera de Córdoba (Ganacor) y elegido como presidente de la NFG, señaló que la nueva federación surgió debido a los problemas jurídicos del Fondo Nacional del Ganado y a lo que él califica como un silencio de las directivas de Fedegán ante el reclamo de la necesidad de renovar el gremio ganadero.
“Tuvimos una asamblea de constitución a la que asistieron 364 ganaderos, con una representación de 131 entes del sector pecuario; es decir, comités, asociaciones, federaciones gremiales de todo el país, y esas instituciones representaban a 64.500 ganaderos”, indicó García.
Según el presidente de la NFG, son cinco los pilares de esta nueva organización. “Uno, que sea de ganaderos para ganaderos; que sea con inclusión, con democratización, participación y no politización”.
Para García, el último punto es uno de los más importantes. “Al gremio ganadero nos lo han fraccionado con temas políticos –apuntó el ganadero–. Estamos dispuestos a trabajar con el gobierno de turno que esté, sin que pertenezcamos a ninguna vertiente más allá de la que busca desarrollar una verdadera política ganadera en unión con el Estado colombiano”.
Durante la clausura del foro ‘Encuentro de la Prosperidad Ganadera para Consolidar la Paz’, en el que el NFG participó activamente, el presidente Santos señaló que, además de coincidir con esos pilares, encuentra que “las oportunidades que tenemos para trabajar juntos son inmensas. Realmente son unas oportunidades que se nos abren, que no habíamos visto en muchísimo tiempo”.
A su vez, el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, apuntó a la necesidad de la unión en el gremio ganadero, en un momento en el que, según él, este sector tiene muchas opciones. “Esta es una actividad muy rentable. Vienen cinco años de vacas gordas que tenemos que aprovechar para posicionarnos como una potencia mundial y latinoamericana en proteína animal. La política partidista, ideológica, no cabe en la producción de carne y de leche, cabe la política productiva, la política de organización, de asociatividad, de unirnos todos los colombianos y todos los ganaderos en torno a disminuir costos, a aumentar productividad para tener un mercado nacional sano y un mercado internacional con oportunidades”, aseguró el jefe de la cartera.
Liquidación del Fondo Nacional Ganadero fue por orden judicial
El viceministro de Agricultura, Juan Pablo Pineda Azuero, explicó que el Fondo Nacional del Ganado (FNG) entró en un proceso de la Ley 1116, que corresponde a la de quiebras o insolvencia. La liquidación de este fondo, administrado por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) hasta el 2015, fue una decisión judicial. Esta ocurrió luego de que desde el 2011 la empresa Friogán, de la que el FNG posee el 78 por ciento de acciones y, por lo tanto, es garante de su deuda, no ha podido pagar el capital de sus obligaciones, no obstante los acuerdos con los bancos, hasta el punto de llegar a la ley de quiebras.
Pineda indicó que “hubo unos cálculos que se salieron de control en torno a una buena idea: unir la cría y la producción de animales con el sacrificio y la comercialización; en los negocios a veces nos va bien, a veces nos va mal. En este caso, con los recursos de los ganaderos, les fue muy mal. La liquidación fue decretada en un procedimiento judicial; y la decretó el Superintendente de Sociedades, no el ministro Iragorri”.
Para el Viceministro, “lo que pasó pasó”, y ahora el foco debe estar en lo que más le conviene al gremio.
“Qué es lo que más le sirve a la actividad de sacrificio, de cría, a la sanitaria y a la producción de leche en el país”. Según él, “esto tiene unos tintes políticos que han montado una neblina o manto que no deja ver la claridad de lo que en realidad se está protegiendo, que es el interés de más de 450.000 familias que dependen del sector ganadero, donde el 80 por ciento son pequeños”.
http://www.eltiempo.com/economia/sectores/programas-del-ministerio-de-agricultura-para-ganaderia/16770151

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Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

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