Bajo el título del “Engaño Lácteo”, José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán (quien tras el descalabro de Friogán está buscando legitimidad en su calidad de administrador del Fondo Nacional del Ganado), se va lanza en ristre contra la industria lechera, haciendo eco a las declaraciones del ministro de Agricultura, quien afirmó hace unos días que de ninguna manera permitiría, que los industriales alegaran que había nuevos inconvenientes para copar la demanda de leche del país.
En ese artículo Lafaurie Rivera, sugiere que Colanta es la empresa que más se beneficia con los subsidios para exportar, sin aportar un solo centavo al Fondo Nacional del Ganado. Como casi todas sus afirmaciones, la premisa es parcialmente cierta, razón por la que la conclusión es errada. TODOS los días Colanta recoge leche de cerca de 12.000 fincas, la mayoría pequeñas, de las cuales el 65% son asociadas y 35% no lo son.
A los no asociados, se les retiene el aporte para el Fondo, y a los asociados se les retiene para contribuir a su cooperativa, la cual ofrece muchos y diversos servicios derivados del cooperativismo, cosa que no le sucede a los ganaderos que aportan al FNG. Además, es probable, que Colanta y en general las cooperativas, NO vayan a aportar mientras el Fondo continúe siendo mal administrado, invirtiendo dineros en empresas sin futuro como es el caso de Friogán, Embriogán y otras desafortunadas inversiones.
La falta de gestión para obtener mayores ingresos en el Fondo Nacional del Ganado, es responsabilidad de Fedegán, que casa peleas con cuanta persona, industria, gobierno, gremio y movimiento, se atreva a cuestionar sus disparates.
No ha entendido que la industria, no es la única responsable por el cambio climático, y que sin ellos la producción no se habría desarrollado como lo ha hecho en esta década. La compra de leche, según el Ministerio de Agricultura, ha crecido en los últimos años más que el PIB nacional.
Demogán, desde su inicio, entendió que la democracia debe ser inclusiva e incluyente, respetuosa del disenso, donde las discusiones deben hacerse entre personas con puntos de vista diferentes pero complementarios, por eso, entendiendo que nuestra prioridad son los ganaderos, hemos invitado a la industria a que haga parte de nuestro movimiento; quisiéramos que los proveedores de insumos también se unan a nosotros.
Para Demogán las mesas separadas no llevan a puerto seguro, creemos, que sólo debatiendo las diferencias entre los involucrados, puede haber entendimiento; la ruptura no es parte de nuestra propuesta y por ello intentamos tender puentes con todos los actores. Por eso, las ideas con las que no coincidimos, son respetadas. Desde luego, se gana o se pierde, pero jamás se impone, que es la única práctica que Fedegán maneja con habilidad que impresiona a todos los que conocen ese gremio por dentro.
Fedegán debe concentrarse en intentar salvar a Friogán sin afectar las finanzas del Fondo Nacional del Ganado. Sería conveniente, que por una vez le presentara a los ganaderos, abierta y democráticamente, un informe de gestión que de manera transparente diga cuánto cuesta Fedegán y exactamente en qué se han gastado los dineros del FNG. Es nuestro convencimiento que un gremio que maneja dineros parafiscales, debe ser auditado, por organismos de control gubernamentales, aparte de una revisoría fiscal democráticamente nombrada.
Por: Roberto Ramírez Ocampo
www.diariodelhuila.com
www.diariodelhuila.com