Los animales que deambulan en busca de alimentos dejaron heridos a los bovinos en las orejas y la cabeza. Agricultor denunció el hecho.
Cinco vaquillas fueron atacadas y heridas por una jauría de perros asilvestrados durante la madrugada de este martes en un predio del sector Tacamó, en la provincia de Osorno.
El hecho ocurrió a las seis de la mañana y genera preocupación en el agricultor y arrendatario del fundo “Pichi Pichil” en Tacamó Surber, Germán Ebbinghaus, quien indicó que los canes han atacado por lo menos tres veces en su predio, “el daño que causan estos animales es terrible, tiempo atrás tuve que sacrificar a un ternero porque le arrancaron todo el hocico”, detalló.
José Márquez, quien es trabajador del predio, fue quien dio la primera alerta sobre este hecho, “A las vaquillas les mordieron las orejas y la cabezas, además las dejaron muy asustadas, no es común lo que pasa y nosotros sabemos que fueron perros asilvestrados por las huellas que dejaron en todo el terreno”, señaló Márquez visiblemente preocupado.
Ebbinghaus puso una denuncia en carabineros y señaló que el ataque le genera pérdidas: “antes cada una de las vaquillas costaba 500 mil pesos promedio, ahora el precio será de $150.000 aproximadamente y si es que las llegó a vender”.
Las vaquillas asustadas por el ataque de la jauría salieron del predio arrasando con todos los cercos y huyendo por la carretera que lleva hasta Puerto Octay. La estampida fue detenida a tiempo por la rápida acción de los trabajadores del lugar, que a las 6 de la mañana se percataron del hecho.
Osvaldo Cea, representante de la Sociedad Protectora de Animales de Osorno, indicó que la responsabilidad de que estos animales salvajes y agresivos existan es de las personas irresponsables que dejan a sus perros en el campo y se olviden completamente de los problemas que generan a otros animales y agricultores.
El voluntario de la entidad indicó que “la única solución hasta el momento es realizar una esterilización”.
“Hace años atrás tuve que sacrificar a un ternero porque le comieron todo el hocico”.
Germán Ebbinghaus, Agricultor
Fuente: Austral Osorno
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