El senador Guido Girardi y la ministra de Salud, Carmen Castillo, defendieron la nueva etapa de la norma y manifestaron su confianza en que el Presidente Sebastián Piñera “sabrá resistir las presiones de la industria por revertirla”.
El 11 de diciembre pasado se publicó en el Diario Oficial el decreto con el reglamento que da inicio a una nueva etapa de la implementación de Ley de Etiquetado y que obligará a las empresas a poner en aquellos productos con sellos una advertencia que señala: “Prefiera alimentos con menos sellos de advertencia”.
Esto generó reacciones en la Industria de Alimentos, que liderados por empresas como Carozzi, Dos en Uno y Nestlé ya anunciaron que estudian “judicializar” el tema pues consideran este mensaje “confuso desde la óptica comunicacional e incorrecto desde la perspectiva técnica y nutricional”.
Ante la arremetida de las empresas, el senador Girardi señaló que “ahora en afán de mantener las utilidades que obtienen dañando la salud de los niños, quieren sabotear la advertencia saludable diciendo que es confusa”.
Girardi, autor de la Ley de Etiquetado Nutricional, señaló que “venimos a respaldar a la ministra y esperamos que el gobierno del Presidente Piñera no se preste para defender los intereses de la comida basura y revertir esta ley que está siendo replicada en todo el mundo. Perú, Uruguay, Israel, Corea, Francia ya están trabajando con esta iniciativa”.
El parlamentario añadió que “vamos acudir al INDH y a organismos internacionales de Derechos Humanos para hacer una presentación contra ABChile, Nestlé, Carozzi y Dos en Uno porque en todos los convenios y tratados internacionales sobre los derechos de los niños está establecido que no se puede abusar de la credulidad infantil y particularmente en situaciones que atentan contra su salud y bienestar. La publicidad engañosa es una violación a los DDHH de los niños”.
La ministra Carmen Castillo manifestó su convicción de que “con el cambio de gobierno continuarán todos los lineamientos de la Salud Pública. Chile tiene un prestigio de más de 70 años de continuidad y esperamos que esta ley sea respetada como corresponde, porque el problema de la obesidad es transversal y no responde a un sector político u otro”.
La ministra de Salud agregó que “la sociedad chilena ha tomado mayor conciencia de escoger alimentos con menos sellos. En ese contexto avalamos todas las exigencias para avanzar en lo que la ley comprometió, que es ir haciendo cada vez más exigente la disponibilidad de los azúcares, la sal, las grasas saturadas”.