El pasado 17 de agosto, Netflix estrenó en su plataforma la película A todos los chicos de los que me enamoré, una comedia romántica adolescente que ha sido todo un éxito de reproducciones. En el largometraje, producido por Netflix, uno de los protagonistas aparece bebiendo un yogur que resulta ser de la marca japonesa Yakult.
Solo 14 días después del estreno del film, la marca experimentó un crecimiento en ventas del 2,6%. Por su parte, el precio de la acción también se ha revalorizado desde entonces un 1,7%. De hecho, tal ha sido el fenómeno causado por esta película que incluso los yogures Yakult llegaron a agotarse en varios establecimientos tras su estreno en Netflix.
Esta marca de yogures no se vende en España, pero en Japón esta bebida probiótica se comercializa desde 1935 y es de las más consumidas. De igual manera, en Estados Unidos, Canadá o México estos yogures también son muy populares, tanto que cada día se consumen 35 millones de unidades en los 38 países donde se puede comprar.
En el terreno económico, Danone es el principal accionista de Yakult, a pesar de que en febrero de 2018 decidió vender 800 millones de dólares en acciones de la compañía. Hasta ese momento, la compañía francesa tenía un 21,29% del accionariado de la japonesa. Sin embargo, desde febrero ha vendido el 14% de los activos. Durante el primer trimestre del año, Yakult anunció una recompra de acciones por valor de 270 millones de euros.
A nivel histórico, esta marca nipona fue la primera en comercializar yogures con Lactobacillus Casei, después de que el fundador de la empresa encontrase esta bacteria, que se presupone beneficiosa para la salud. En Europa, Danone fue quien introdujo yogures con L. Casei a través de su popular filial Actimel.