La Cooperativa capacita a sus productores en diversas temáticas para afrontar mejor el final de un año muy complejo, pero que ya muestra indicios de mejora camino a 2017 y oportunidades de negocios que se abren en concreto para Argentina.
TANTI, CORDOBA (Por Elida Thiery, enviada especial) – Como una forma de pensar de otra manera el negocio lechero, de salir del día a día con lucha por los precios, de los inconvenientes políticos y financieros, cada año SanCor realiza en Tanti su encuentro en el marco del Programa del Desarrollo Tecnológico. En su sexta edición el Congreso permitió plantear objetivos claros de mejora para el sector, pero con una progresión gradual.
El PDT propone un asesoramiento integral para el desarrollo productivo, económico, financiero y patrimonial orientado a socios de SanCor que avanza con perspectivas de mejora continua y que está vigente desde 2009 para la concreta sostenibilidad de las empresas tamberas. Tiene tres modalidades extendido, productivo y tradicional, según las necesidades de cada socio con ejecuciones, diagnósticos, planes de mejora, controles y evaluaciones entre sus aspectos más salientes.
En el marco de capacitación y predisposición a seguir dando pelea a la producción, el mensaje de bienvenida y a modo de convicción, el presidente de la mayor cooperativa del país apostó a que «a pesar de las fortalezas y debilidades que tenemos como movimiento cooperativo, los momentos difíciles que podemos pasar como sector, como empresa, como tamberos, como operarios de cada una de nuestras empresas, lo importante es tener información, teniendo la posibilidad de así lograr disensos, distintas opiniones». La avidez de conocer más y la importante presencia de los productores en la Residencia Serrana de Tanti, que cada año los recibe, significa que todos quieren saber cómo poder avanzar en desarrollo con más o menos escollos, pero en definitiva haciendo un trabajo que conlleva afecto, pero no debe dejar de lado las variables económicas, de la política y del ánimo de los propios productores, a lo que se suma la influencia generacional en las empresas y por lo tanto, SanCor trabaja en todas estas formas de acercamiento para mejorar las condiciones de sus propios socios.
«El esfuerzo, la voluntad y los objetivos de cada uno hacia adelante nos marcan cómo debemos prepararnos», aseguró Gustavo Ferrero valorizando la intención democrática que rige a esta empresa donde «estos momentos complejos son los que terminan fortaleciendo a nuestro movimiento, con el aporte de todos», manifestó en el indicio de los conceptos que la próxima semana se podrán leer más extensamente en CASTELLANOS y a los que atendieron 420 productores.
Pronósticos
La sucesión de charlas colmaron el día y la atención se fue poniendo en diferentes conceptos, todos orientados a pensar mejor cada una de las explotaciones.
Con el abril más llovedor de los últimos años y el mayo más frío de los últimos 55 años, la crisis climática claramente fue una gran variable de afección para la lechería. Para entender la precisión, la evolución de los pronósticos, pero sobre todo la real variabilidad climática, «con un clima enmarcado en el cambio climático que lleva a la aparición de más extremos», el Lic. Roberto De Ruyver del INTA Clima Castelar, explicó las ondas que marcan el desarrollo del clima. Parábolas que se repiten, incluso entre los siglos y con datos concretos, derribando mitos.
El desarrollo de la tecnología permite precisiones exactas a cuatro o cinco días, hay que leerlos por regiones bien definidas y no dejarse influenciar por los ánimos y versiones de las tantas que hay en el día a día, atendiendo realmente a lo primordial de la producción.
En sus conclusiones De Ryuver sostuvo que en este verano no va a haber ocurrencia de Niño, no habrá lluvias tan copiosas, sino que se presentará una Niña débil que traerá algunas precipitaciones y temperaturas normales, cálidas y adecuadas.
En lo más próximo, será esta una primavera con lluvias de normales a leves con un leve ascenso del promedio histórico, esto sobre la base de «certezas que dan los pronósticos a tres meses.
Por Elida Thiery
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