¿Es viable la lechería en Argentina?

La crisis lechera impone debates de nivel productivo, político y económico. La importancia de las pasturas, la vuelta a un manejo exhaustivo y la reducción del costo argentino asoman como las urgencias para el sector y para el país.
Share on twitter
Share on facebook
Share on linkedin
Share on whatsapp
Share on email

La crisis lechera impone debates de nivel productivo, político y económico. La importancia de las pasturas, la vuelta a un manejo exhaustivo y la reducción del costo argentino asoman como las urgencias para el sector y para el país.
Esta semana, en la Experiencia Forrajera de Sunchales se plantearon desafíos incómodos. La productividad, tanto en la esfera pública como en la privada, fue el eje central que atravesó de forma coincidente las charlas técnicas como las teóricas.
Si bien se celebró la llegada del diálogo que plantea la nueva administración (compuesta de manera inédita por profesionales del sector), se abrieron serios interrogantes sobre la continuidad de metodologías cortoplacistas. El subsidio lechero en particular y los subsidios en general a estructuras ineficientes, tanto en materia productiva, de transporte, sindical y estatal, constituyen un cepo encubierto a un país sustentable.
“Los subsidios te engordan sin hacerte eficiente”, disparó Reinaldo Postachini, el titular de Claas, un obsesionado por devolver la cultura del trabajo tranqueras afuera y adentro.
En las últimas décadas, la Argentina modificó sus esquemas políticos (presidencialismos a cuatro años), económicos (emergencias eternas), y productivos (corrimiento de la barrera agropecuaria), cada vez más cortoplacistas. El resultado lo vemos en estructuras públicas y privadas macrocefálicas que se mantienen a costa del esfuerzo de quienes generan la riqueza. Hoy es más tentador un cargo en la administración pública que generar un emprendimiento. Monopolios, corrupción y décadas de populismo le agregan dificultad al camino de salida.
Sindicalistas, periodistas, legisladores y muchos argentinos de a pie parecen haber recuperado la conciencia cívica luego de una década de amnesia ciudadana. La tendencia a perdonar mentiras, desfalcos, tropelías y delitos varios parece haber llegado a su fin. Enhorabuena.
La vuelta del país al mundo es muy positiva y devuelve previsibilidad. Pero el compromiso de un país viable requiere que todos los estamentos retomen el compromiso de la productividad. No hay otra.
Federico Aguer
faguer@ellitoral.com
www.campolitoral.com.ar/

Mirá También

Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

Te puede interesar

Notas
Relacionadas