Dulce de leche argentino-catalán gana fama en el mundo

Hace 31 años el cordobés Alejandro Caro decidió junto a su hermano probar suerte en Barcelona. Tras los difíciles primeros años, comenzaron a importar productos nacionales, como el dulce de leche.
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Hace 31 años el cordobés Alejandro Caro decidió junto a su hermano probar suerte en Barcelona. Tras los difíciles primeros años, comenzaron a importar productos nacionales, como el dulce de leche.
Hasta que un día a fines del siglo XX debido a una restricción a las importaciones en la UE empezaron a producirlo, explicó Caro a Ámbito Biz, sin perder su tonada pese a los años que lleva fuera de Argentina. Hoy el dulce de leche Márdel es uno de los más importantes en España y se comercializa en unos 40 países. Además, su fan número uno es nada menos que Lionel Messi.
Por: Juan Pablo Marino
Periodista: ¿Cómo decidió desembarcar en Barcelona?
Alejandro Caro: En 1985 la situación económica en la Argentina no era muy buena por lo que decidimos probar suerte con mi hermano José en Barcelona, ciudad a la que él había conocido años antes. Llegamos con una mano atrás y otra adelante. En los primeros cinco años la experiencia resultó dura: trabajamos de lavaplatos y también de albañil. La idea original era quedarnos un año y volver porque yo estudiaba Ciencias Económicas y no había acabado la carrera.
P.: ¿Qué oportunidad vieron para comercializar dulce de leche?
A.C.: Fuimos viendo que existía una colectividad grande de argentinos en España y no había nadie que le prestara atención, no se importaba casi nada desde Argentina. Entonces decidimos en 1991 importar vinos, dulce de batata desde Argentina. Luego incorporamos el dulce de leche. A mediados de los 90´ la peseta española se empezó a devaluar con respecto al dólar, y nos asustamos un poco porque pensamos que la importación se cortaría. Así fue que empezamos a fabricar alfajores y compramos una empresa quebrada que producía helados para hacernos de una instalación más amplia.
P.: ¿En qué momento comenzaron a producir el dulce de leche?
A.C.: En 1997, la UE prohibió la entrada de productos lácteos de Argentina. Fue una medida sanitaria, pero también política. Esto nos causó mucho daño y tuvimos que tomar una decisión, o tirar para adelante o cerrar la empresa. Decidimos la primera opción, compramos un terreno, construimos una planta, adquirimos toda la maquinaria en Argentina e hicimos venir a un ingeniero en alimentos. Fue pese a que los restoranes argentinos nos decían ´no nos traigas nunca dulce de leche, acá, el paladar es diferente, es muy dulce, empalagoso, no va a funcionar nunca´.
P.: Pero ustedes veían algo diferente con relación al negocio…
A.C.: Sí, observábamos cierta respuesta de la gente. Confiamos en que tenía que funcionar, si a nosotros nos gusta, les tiene que gustar también a los españoles.
P.: ¿Cuál fue el principal obstáculo que debieron sortear para llegar a dónde están hoy?
A.C.: Uno nunca deja de ser un inmigrante, aquí hay que estar de mostrando todo el tiempo que sos inocente, al revés de lo que marca el derecho. Acceder a créditos no nos ha resultado fácil.
P.: ¿Cómo es la actualidad de la empresa?
A.C.: En España estamos en casi todas las cadenas de supermercados. Hace poco inauguramos una nueva fábrica de dulce de leche, con una capacidad de producción de 8 millones y medio de kilos.
P.: ¿La receta es similar al dulce de leche argentino o tiene alguna particularidad?
A.C.: Nuestro director de producción dice que se debe hacer sólo con leche y azúcar. No contiene esencia de vainilla como el 90% del dulce de leche que hay en la Argentina. Hacemos 20 variedades de dulce de leche. A uno que lo llamamos gourmet sí le ponemos vainilla. La materia prima es europea. Trabajamos con leche holandesa, que es la mejor leche en Europa, la más uniforme, el azúcar de Francia, la harina, en Italia.
P.: ¿Cómo se distribuyen los roles con su hermano?
A.C.: Yo estoy en la parte comercial y José en producción y RR.HH.
P.: ¿Cuántos empleados tienen?
A.C.: Alrededor de 60. Son de siete nacionalidades diferentes. En el departamento comercial hay 10 argentinos.
P.: Además de dulce de leche, ¿qué más producen?
A.C.: Fabricamos dulce de batata, empanadas, tapas de empanadas, alfajores y chorizos.
P.: ¿Lograron cruzar las fronteras con el producto?
A.C.: Sí, actualmente exportamos dulce de leche a más de 40 países. Hace unas semanas por ejemplo salió un contenedor para Omán y otro para Kuwait. En todos los países árabes estamos trabajando muy bien, también en Asia, como Corea del Sur, o Filipinas.
P.: ¿Cómo llegaron a tantos países?
A.C.: Nos ayudó mucho concurrir a la feria SIAL en París, una de las ferias de alimentos más importantes del mundo. Armamos un stand pequeño para ver cuál era la reacción de la gente. Realmente nos sorprendió, tuvimos 250 contactos en cinco días. Por ejemplo, el principal importador de productos para pastelería de Grecia se mostró muy interesado. Al poco tiempo fuimos a Atenas con un repostero y un técnico para enseñarles todo lo que se puede hacer con el producto. Hoy es un cliente importantísimo para nosotros: le vendemos más de 60 mil kilos al año. Este año tenemos previsto acudir a ferias en EE.UU., Dubái, Filipinas, China, entre otras.
P.: ¿Les sorprendió el interés por el dulce de leche en países tan lejanos?
A.C.: Nosotros somos unos enamorados del dulce de leche. A mí en particular me parece un producto fantástico desde chico. Entonces intento transmiltir mi entusiasmo a todo el equipo de vendedores. Llegamos a la conclusión de que el dulce de leche no sabe de razas o de religiones, o te gusta o no te gusta, pero gracias a Dios le gusta a la mayoría de la gente.
P.: ¿Qué objetivos se han planteado de cara al futuro?
A.C.: Queremos llevar a cada rincón del planeta el dulce de leche en general y nuestra marca en particular. Tenemos como parámetro lo que es Nutella (crema a base de cacao, leche y avellanas producida por la empresa italiana Ferrero) en el mundo. Trabajamos con una economía muy estable con unos proveedores muy serios y tenemos todos los elementos como para lograrlo, sobre todo porque acá tenemos unas reglas de juego muy claras, es la facilidad que nos da estar en Europa. Aparte, para el resto del mundo.
• CIFRAS
Inversión inicial: 400 mil euros aproximadamente.
Producción 2015: 1,5 millón de kilos de dulce de leche.
Facturación 2015: 6 millones de euros.
Precio del frasco de 450 gramos: 2,5 euros.
Exportaciones: a más de 40 países.
• MESSI, FAN N° 1 DE MÁRDEL
Con orgullo y gran admiración, Alejandro contó en detalle a Ámbito Biz la relación de amistad que mantiene con el astro del fútbol mundial, Lionel Messi y su familia. «Lo conozco desde hace varios años, prácticamente desde que llegó a Barcelona, es un excelente chico y además tiene una bellísima familia, desde su padre Jorge hasta sus hermanos Rodrigo y Matías». Reveló que el crac del Barcelona es un fan del dulce de leche que produce Caro: «Se vuelve loco, y cuando puede lo prueba». Así lo dio a conocer el mismísimo Leo a través de sus redes sociales, cuando hace un tiempo publicó una foto tomando mate y comiendo tostadas con dulce de leche Márdel. «Messi y su familia han seguido nuestro trabajo y saben del sacrificio que ha sido llegar a donde estamos hoy. Y es por eso que han tenido la gentileza de darnos una mano, con la publicación de esa foto», señaló Alejandro, quien recordó que la última vez que vio al capitán de la albiceleste «fue en abril cuando vino mi sobrino de Argentina y nos juntamos a tomar un café con él en un hotel. De ahí lo acompañamos al entrenamiento».
http://www.ambito.com/diario/844145-dulce-de-leche-argentino-catalan-gana-fama-en-el-mundo

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Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

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