Reuniones de todo tipo en semanas de cambio, hablan más que nunca de una lechería revolucionada, que no puede salir de la crisis de precios y de ausencia de políticas.
Por Elida Thiery (especial para Lechería Latina) – La obnubilación y las promesas vacías a veces llevan a accionar de un modo poco disimulado, esto es lo que sucedió días atrás en el centro-este cordobés. Allí el caudillo del campo kirchnerista, Ider Peretti llamó a sus nuevos acólitos al territorio morterense.
Como ex presidente de la Sociedad Rural de Morteros, actual integrante de la comisión directiva y acompañante de su esposa como mandataria del lugar, el hombre conocido en la zona como gran deudor en otros tiempos, es hoy quien comanda definiciones de permisos de exportación e incluso las líneas de opinión de los ínfimos dirigentes que celebran las medidas desacertadas de esta administración nacional, además de la Cámara de Productores y Exportadores de Cereales y Oleaginosas y la Confederación General Económica, ambas entidades con gran vínculo estatal, llamó a una reunión gastronómica a los únicos que hoy pueden darle lugar y trascendencia.
A la vista de muchos, quedaron por demás expuestos dos dirigentes de la Asociación de Productores de Leche de la República Argentina. La entidad formada este año, con único logro el bloqueo de industrias a mitad de año, sin poder sostener incluso un vínculo con Atilra, que fue la organización que primero los deslumbró, prometió ser diferente al resto, no cometer los mismos errores del acumulado de años de las demás y antes de lo estimado, se vincularon de las maneras menos recomendables, para decepcionar a muchos productores. Juanchi Otero y Daniel Oggero no pudieron resistir la tentación de sentarse una vez más a la mesa con Ider, el que les hizo emitir un comunicado institucional, elevándolo como el gestor de mejoras en la lechería que sobrepasaron lo concreto, siguió prometiendo semanas atrás objetivos inalcanzables, mucho más ahora cuando se alejan las posibilidades oficialistas ante un debilitados ballotage y sobre todo, cuando los modos empleados hasta el momento no lograron más que desaciertos múltiples que ya se saben no funcionarían de darse una gestión más de este movimiento.
Pero no sólo estuvieron ellos, sino también algunos faltos de arrepentimiento de Federación Agraria Argentina y de la Cámara de Productores de Leche de Córdoba, intentando estos últimos disimular una salida de la denominación de “tamberos K”, que sólo duró unos meses, sobre el comienzo de este 2015, e incluso los ha llevado en las últimas horas a usar el nombre de entidades cercanas para promover ficticios llamados a reuniones con funcionarios de la Nación, de baja efectividad.
¿Habrá en el encuentro pedido Peretti algún tipo de elaboración de mensaje para llevarle al Papa Francisco, de la mano de Guilliermo Moreno?, ¿recordarán estos dirigentes todo lo dicho sobre su persona y la del enviado a Italia a limpiar culpas?, ¿seguirán prometiéndoles gestiones de préstamos del Banco Nación, que ya fueron negadas en reiteradas oportunidades por la falta de solvencia de esos sujetos?, ¿seguirá el propio Ider soñando con el comando de la Subsecretaría de Lechería, en lugar de Jorge Videla, sin logro alguno en su gestión de seis años?.
La obediencia ciega es siempre peligrosa. Presentarse ante situaciones en las cuales no se puede cuestionar, sino simplemente acatar lo que propone quien ostenta el poder hace que se desmoronen los mandatos que se dicen representar.
Nade de lo que Ider Peretti pueda prometer hoy es factible de cumplimiento, es más ninguna de las cuestiones indicadas en este trayecto de 2015 por parte del dirigente kirchnerista pudieron hacerse realidad, empezando el recuento por las fallidas citas de la Mesa técnica por el Precio de la Leche.
Para muchos el idilio de las luces del poder o de las grandes ciudades les hacen olvidar las luchas iniciáticas de su vida gremial, aquellas que los instalaron como referentes para muchos productores, por compartir vivencias y situaciones, pero que hoy los alejan de la realidad, ante tantos compromisos.
Sin resolver nada, porque el precio se mantiene este mes, más por cuestiones coyunturales y políticas, que por obra de la influencia de alguna persona, ya que los deberían estar trabajando en esto sólo planean la última misión infructuosa a China, el tambo en la Argentina sigue marcando los indicios del coraje, con una pérdida constante, que no se entiende ni en otras cuencas también hoy críticas, ni en países que siguen tratando de aprender del nuestro, en productividad, desarrollo y empuje.
Todos juntos
Mientras estos encuentros no producen nada, hay gestiones que no cesan.
En la ciudad de Rafaela se llevará a cabo un importante encuentro, donde la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina convoque a las grandes empresas del sector. Será así que en la ciudad donde se desarrollaron los últimos conflictos, desde el reclamo e impedimento de la baja de la leche en enero, hasta los bloqueos de julio y la irremontable crisis sectorial nacional, se vuelvan a generar novedades.
Será entonces la intención de recuperar la buena relación entre industrias y trabajadores, a través de la gremial será lo más relevante, con todos sus aspectos salientes incluidos.
Según se pudo conocer, el temario es amplio, aunque sin lugar a dudas el fondo del encuentro del martes 17 está dado para debatir el aporte solidario. Este monto extraordinario que los industriales tienen que aportar por empleado, desde 2009, actualmente está resistido por las pymes y en suspenso su determinación. Es más, es la piedra del escándalo en el seno del Centro de la Industria Lechera, que tuvo previo a la crisis de precios y bloqueos múltiples enfrentamientos internos y amenazas de quiebre por las posturas encontradas al respecto.
Como nada es casual, ese mismo día y por la tarde, en la Estación Experimental Agropecuaria Rafaela del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria se hará la inauguración del tambo robotizado que la empresa De Laval instaló en el lugar. Un evento ansiado y a la vez postergado por el propio Gobierno, que no se animaba a contar un avance de este estilo en medio de la angustia de la baja de precios, llegará para oxigenar el final de la gestión oficial, por lo cual no se descarta la presencia de autoridades ligadas al tema en el evento.
Por Elida Thiery (especial para Lechería Latina)