El gremio de empleados lecheros aseguró “La Sibila es un competidor desleal porque con los beneficios que obtiene, está realizando inversiones importantes en la República Oriental del Uruguay».
El titular de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), Héctor Ponce, recibió en su sede al Ministro de Producción de la provincia de Entre Ríos, Roberto Schunk para analizar los problemas generados por las irregularidades e informalidad en que se desenvuelven muchas de las Industrias Lácteas de la provincia, circunstancia que afecta a los trabajadores del sector y a las empresas que se encuadran en la legalidad, creando una competencia desleal que desequilibra a toda la industria lechera de la provincia.
Ponce “aclaró que “hay algunos actores de la cadena que compiten deslealmente y lo vamos a decir con todas las letras, hay una empresa como La Sibila, que desde el punto de vista económico y desde el punto de vista financiero, tiene buenas ganancias y grandes ventajas por encima de las otras empresas, principalmente sobre Cotapa y Cotagú, y eso es injusto ya que tendría que tener el mismo tratamiento que el resto de las empresas lácteas, es decir que se debe ajustar al convenio colectivo de trabajo que rige la actividad lechera”.
Ponce denunció ante el Ministro de Producción, que “La Sibila es un competidor desleal porque con los beneficios que obtiene, está realizando inversiones importantes en la República Oriental del Uruguay, con la que no tenemos ningún tipo de problemas, pero sabemos que eso va a traer inconvenientes aun mayores en un futuro para la actividad” concluyó el sindicalista.
Por su parte, el Ministro de Producción de Entre Ríos, Roberto Schunk aclaró que “le conté al secretario de Atilra el proceso de Cotapa. Esta empresa era una cooperativa que estaba totalmente fundida, con 140 trabajadores en la calle y el gobierno provincial tomó la decisión de no desampararla y seguir adelante para proteger las fuentes de trabajo”, agregó.
“Hay una decisión que tomó el gobierno provincial de involucrarse y ser un actor directo en la nueva sociedad creada para Cotapa y que es una sociedad con participación mayoritaria del estado provincial, lo hicimos precisamente para salvar la fuente de trabajo”, indicó Schunk.
Añadió al respecto que el promedio de edad de los trabajadores era de 40 años, con lo cual “era gente que no iba a conseguir trabajo fácilmente y que no se iba a poder jubilar en el futuro”.Reconoció que “en algunas gestiones estamos con problemas” aunque “hubo conciliación” en la charla con Ponce. “Soy muy consciente del planteo que me ha hecho el Secretario General de Atilra pero hay que seguir conversando”, sostuvo.
“Siempre tengo buenas expectativas porque creo que siempre discutimos con hombres de buena voluntad; estoy seguro que peleo por lo mismo que pelea él. Por eso hicimos lo que hicimos, sino hoy la empresa no existiría, seguramente se hubiera desguazado”, añadió el funcionario.
Además afirmó que “cuando los mercados se concentran, y hay muchos pequeños actores que venden y muy pocos que compran, se van integrando verticalmente las grandes empresas y desaparecen los pequeños. Hoy de los 1633 tambos que tenemos en la provincia el 90% son tambos familiares”.
“Yo reconozco también lo que aquí se me planteó acerca de la informalidad de muchísima gente, pero estamos llevando adelante algunas acciones como el queso Nogoyá, que estamos tratando de cooperativizarlo en pequeños productores para que a través del INTI, del INTA y del propio gobierno provincial, mejoremos la calidad de nuestros quesos para que toda esa gente pueda salir de la informalidad”, detalló Schunk.
Por otra parte, el ministro explicó que “el problema en realidad no está en los productores ni en la industria, la respuesta hay que buscarla en las grandes cadenas del mercado que son las que se quedan con el esfuerzo de nuestros productores. Un ejemplo concreto es un pequeño productor que le vende a un intermediario un queso sardo a 14 pesos, cuando uno va a la góndola, ese queso sale arriba de los 40 pesos”, consideró.
Finalmente Schunk, explicó que “uno de los grandes problemas que tiene la inflación en Argentina, es precisamente la extranjerización de las cadenas de comercialización. Por eso estamos apuntando en la provincia a hacer un gran mercado concentrador mayorista y minorista con todos los productores de la leche para acercar el productor al consumidor”, concluyó.