La lechería sigue indefinida. Una primavera que debía tener mucha leche, por la gran cantidad de lluvia empieza a mostrar su afección en todas las cuencas. 
Con pagos de hasta 1,49 pesos por litro, en términos generales, con bajas de por lo menos tres centavos en las liquidaciones desde los inicios de los conflictos de este año, generan un marco de confusión que afecta a los productores y entretiene en cuestiones no tan trascendentes a quienes deberían estar tomando decisiones para resguardarlos.
Mientras que durante el punto más álgido de las controversias entre industrias y productores la Subsecretaría de Lechería de la Nación no apareció para mediar ni resolver, salvo en aquella noche del jueves 9 de agosto, para conseguir la firma de un acuerdo absolutamente incumplido, con el paso del tiempo los funcionarios reiniciaron su tránsito por la región para iniciar otra vez el tendido de vínculos. Con pocos resultados, con mínima difusión y con la intención de promover las bases de una ley de lechería inconsulta, una vez más como en 2009, esas visitas hicieron que Jorge Videla en el último número de Nuestro Agro se encargue de personalizar la mirada del problema, en vez de tomar la distancia propia de un funcionario.
En el texto brinda su versión de los hechos, donde dice entender que el derramamiento de leche fue promovido por los representantes de los productores; y no como de cerca se vio que fueron los mismos tamberos los que lo decidieron, lo cual le fue mal relatado por su gente cercana, como es el caso de los máximos dirigentes de Meprolsafe, la entidad que puso pausa en su prédica oficialista durante el conflicto, con razones varias veces entendidas en estas letras, para luego volver a la senda que se generaron desde 2008.
En definitiva, Videla tiene términos por demás cargados con todos los dirigentes, como es el caso de Rubén Ferrero, presidente de CRA; de Fernando Calcha, titular de la SRR, e incluso de Guillermo Giannassi, titular de la lechería de FAA. Además incluye en un falso entredicho por la Ley de Arrendamientos a Daniel Oggero y a Gustavo Vionnet.
Esto motivó al tambero de Ramona a responderle al funcionario, que el jueves tendría el plazo cumplido, según sus dichos en la última reunión por el caso, para la presentación de resultados del estudio de competitividad de la cadena láctea, sobre lo cual no hay convocatoria alguna.
“Acá cualquiera que entienda un poco de lechería, averigüe y se ponga a trabajar, no necesita un curso en Harvard para resolver los problemas”, dice Oggero sobre Videla, quien acusó a la Mesa Nacional de Productores de Leche de no haber presentado todos los datos solicitados para realizar el relevamiento que se debería estar concluyendo, pero que hace más de dos años que se reclama para equilibrar al sector.
El dirigente tambero encendió su volumen de críticas. “A este chico lo habrán sorteado después de hacer un casting de ineptos para todo servicio. Obviamente rodeado de un coro de ángeles o de bailarinas de Moreno, como son los chupamedias que lo rodean, Roberto Socín, Ricardo Garnero, Juanchi Trossero, Leveratto, D´Angelo, Poi y Manavella”, que lejos de la convocatoria que tenían en 2007, por ejemplo para convocar el paro nacional de aquel diciembre, “cómo es que ya no convocan a más gente, que perdieron ese poder”. A eso añadió la característica de cobardía y de impunidad que les da la cercanía a los funcionarios nacionales.
El nivel de enfrentamiento crece, las soluciones no llegan y en medio de todo esto surge un proyecto de Ley que se desconoce públicamente y que incluso no saben de qué se trata los productores, ni la industria, que serán regidos por esta supuesta futura norma.
Oggero que ya perdió uno de los dos tambos que tenía años atrás, todos en tierra arrendada, defendió la trascendencia de las acciones de Federación Agraria Argentina, a la que pertenece, ante las posiciones de los críticos de organizaciones tamberas de otro origen, deslindándose al mismo tiempo de relaciones cercanas que le endilgó el Subsecretario, las cuales no fueron más allá de las alternativas conocidas de las protestas. “Cuando muchos estaban en pañales, don Humberto Volando siendo diputado nacional había presentado el primer proyecto de ley de lechería”, lo que marca el camino recorrido por FAA en el sector.
Lo que pide Oggero es “aplicar la cordura, el sentido común, dejando de lado los intereses políticos y trabajar por el bien de la lechería argentina; y de no ser así, que no hagan más nada, porque si no con la nueva Ley que quieren impulsar se va a tener el mismo resultado que la liquidación única. No se animan a debatir, ¿por qué la ocultan tanto?, es preferible tener una Ley consensuada”.
Parece que las lógicas empleadas nunca coinciden, que la falta de mirada realista demora las definiciones y que del lado de los que toman decisiones hay poco interés en resolver, en mejorar y en potenciar a este sector tan importante para el país, pero también para la región.
La historia sectorial es larga, seguirá sumando secuencias, debates, desencuentros y problemas, con menor balance para el lado de las soluciones, por eso hay que seguirla fielmente.
por Elida Thiery
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