En un año, las ventas de lácteos subieron en Mendoza un 53,38% y 46,86% las de carne.
Que no se reconozca la inflación real, no significa que no exista. Y vaya que existe. Una prueba de ello surge de los propios datos del Indec cuando mide facturación en los supermercados de Mendoza. En estos informes se ve con datos a julio cómo en solo un año aumentaron los ingresos corrientes de los supermercados de la provincia un 34,3% en forma global, con picos del 53,38% en la venta específica de lácteos, del 46,86% en carnes y del 43,9% en bebidas. Todos rubros de primera necesidad.
Difícilmente en el actual contexto económico de estancamiento con tendencia hacia la recesión, las familias de Mendoza están comprando y consumiendo en cantidad casi un 50% más de carnes, bebidas o lácteos. ¿Entonces por qué sube tanto la facturación por venta de estos productos en los supermercados de Mendoza que releva el Indec? Es simple, porque en el cálculo de facturación a “precios corrientes” lo que suben son los precios de los productos no la cantidad de artículos vendidos. El crecimiento en por inflación, no por más consumo.
A julio de 2014 (último dato relevado para las provincias y dado a conocer el 29 de septiembre) el Indec contabilizó una facturación total en los supermercados de Mendoza de $812,79 millones, un aumento del 0,8% frente a junio y del 34,3% en la comparación interanual contra julio de 2013. A nivel país, según datos del Indec, la facturación a precios corrientes en los supermercados creció en julio 0,9% frente a junio y un 35,2% en la comparación contra julio de 2013.
Por rubros
En la comparación por rubros, allí donde los productos más indispensables como los alimentos son los que más suben de precios, es donde más aumentos en la facturación a precios corrientes en los supermercados se registran.
Siguiendo con los datos del Indec a julio de 2014, el rubro de productos que más creció en facturación en Mendoza son los lácteos, con un aumento interanual del 53,38% al registrarse ventas totales mensuales en los establecimientos relevados por $53,72 millones.
En segundo lugar se ubican las carnes, con un aumento del 46,86% en el total facturado por los supermercados en la comparación entre julio de 2014 ($113,45 millones) e igual mes de 2013 ($77,25 millones).
En el tercer lugar del podio están las bebidas, con un aumento del 43,9% en la facturación por venta en los supermercados ($71,60 millones en julio de 2014).
Cuarto quedaron los productos de Almacén, con un aumento interanual en la facturación del 32,6%, según el Indec.
De los datos surge claramente que más allá de la inflación que blanquea el Indec (según datos del organismo entre diciembre de 2013 y julio de 2014, la inflación acumulada implícita en los supermercados asciende al 18,7%), la facturación a precios corrientes en los supermercados sube a niveles cercanos al 50% anual en algunos rubros no porque se consuma más cantidad sino porque hay aumentos mayores de precios. Y se da justo en los rubros de primera necesidad (alimentos y bebidas) para las familias y en donde más se siente el golpe de la inflación.
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