Argentina: Martes definitorio en el conflicto por la baja del precio de la leche

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Con la reunión de las industrias en el CIL y su consecuencia ante Augusto Costa, los tamberos conocerán la postura de las empresas, ante la iniciativa de bajar 20 centavos en dos meses y dejar en tres pesos la leche por litro. Entre espera y tensiones, la lechería argentina escribe un nuevo capítulo de una historia fuerte.
La pausa en la protesta autoimpuesta por los tamberos el viernes tendrá hoy su tiempo de definición.
De la comunicación de la baja de precios, la instancia de diálogo solicitada, la confirmación de la medida que llevará diez centavos más abajo al litro de leche en las liquidaciones de este mes y similar número para lo que se pague en febrero, dejando a la unidad de medida en los tres pesos, ha ocurrido bastante.
Los bloqueos duraron unas horas con el comienzo del año en Suardi y hoy tendrán un momento de definiciones, tanto para la industria, como para los productores, pero así también para el Gobierno Nacional.
Será el Centro de la Industria Lechera el que se reúna en Buenos Aires, adelantando el encuentro mensual, apurado por la situación. Hay varios temas pendientes en la agenda, desde diciembre, pero sin dudas los precios serán lo que se deban debatir abiertamente, para entender cuál es la postura mayoritaria.
Mientras La Serenísima sale a competir y promete pagar algo más, siendo la única en esa sintonía, esta mañana el planteo serán las modificaciones que se dieron desde el 18 de diciembre en el mercado lácteo argentino, con todas sus influencias externas, pero también con toda la influencia interna, donde el dólar queda como el parámetro más pesado con su retraso cambiario.
Claro que la carga salarial es otro de los grandes pesos que soporta la industria hoy con permisos de exportación que están saliendo con cierta agilidad, pero que no tienen motivos de tal apuro porque la caída en las ventas al exterior es notoria y a precios irrisorios.
Hoy para las industrias es complejo el parámetro crediticio, por lo tanto, no hay ningún frente de calma en la batea donde se mezcla todo el panorama. Sin esperanzas acerca del cambio en las políticas, en los humores de los funcionarios o de los mismos empresarios, la lechería toda deberá dar pelea en un plazo de un año complejo, en el que el clima empieza a dejar de colaborar también y la debilidad se hace tan cotidiana como la propia tarea del tambo.
Será esto lo que también se exponga horas más tarde en la Secretaría de Comercio Exterior, a pedido del propio CIL. Augusto Costa quizá haga uso de la herencia en el cargo y vuelva a presionar a la industria, para revertir la medida, pero sin ayuda alguna, como ya esperan muchos de los empresarios y como suponen los propios tamberos. Más de lo mismo en la actitud oficial.
EN MORTEROS
El sábado por la tarde, Ider Peretti y su esposa, Daniela Borgogno, en calidad de presidente de la Sociedad Rural de Morteros, ella; y él como representante del Gobierno Nacional, se reunieron con casi una treintena de productores. Querían conocer de primera mano cómo se habían dado las cosas, cuáles eran las ideas de los tamberos, pero no dejaron pasar la oportunidad para expresar algunas ideas conspirativas.
Lo cierto es que con todo el recuento de instancias, donde no faltaron las facturas pasadas al oficialista por la falta de respuesta a tiempo en otras instancias, como la de julio pasado cuando el propio Subsecretario de Lechería prometió ayudas y encuentros que quedaron en la nada, también se escucharon frases como “esto es producto del terrorismo lechero”, al cual Peretti le puso apellidos bien típicos rafaelinos, confirmando lo que desde este espacio predicamos sobre el cambio de eje de las decisiones en la lechería nacional.
El hombre que consiguió instalar un centro de genética, del cual no se conocen resultados, a pesar de los millonarios aportes del Estado, se comprometió a elevar la causa al Jefe de Gabinete de Ministros. Supuestamente, ayer por la mañana Jorge Capitanich tenía en su oficina un informe del caso, pero aún no hubo convocatorias ejecutivas para debatirlo.
LA ESPERA
Los productores habían conseguido el 2 de enero la promesa de postergar la impresión de liquidaciones hasta después del encuentro del CIL, para que se pueda revertir la medida, en caso de existir algún cambio.
De todos modos, la palabra se cumple y con la tensión del caso, hasta que no se abra la puerta de la primera reunión, no se avanzará demasiado en la protesta.
El apoyo de todos los sectores productivos, a los que se añaden los cordobeses y los bonaerenses plantea un escenario que deberá construir fortalezas para poder afrontar el pedido de sostenimiento de precios, pero también para poder trasladar el reclamo de una manera bien concreta hacia la sociedad, en caso de no revertirse la medida confirmada por Williner y Verónica, a la cual se sumarán en las próximas semanas otras empresas, de las grandes y claro que también de las más chicas.
Todo esto se repasará mañana miércoles a las 11 horas, cuando el ministro de la Producción, Carlos Fascendini se reúna en la sede de la cartera con representantes de los productores, los industriales y las pymes que conforman la Cadena de Valor Láctea Santafesina.
El interrogante que se sumará a esto es si por la baja en los precios y la convulsión que esto representa Santa Fe se animará a seguir adelante con la contraposición de sistemas, donde la liquidación única es cuestionada por debajo del Acuerdo Lácteo Santafesino, hecho que tiene fecha para el próximo 14.
Por Elida Thiery
http://www.diariolaopinion.com.ar

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Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

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