La empresa El Amanecer volverá a trabajar. Lo hará gracias al esfuerzo de sus propios empleados, que han formado una cooperativa para mantener sus puestos de trabajo. «Vamos a necesitar capital operativo», comentó Fabio Pandiani en el aire de la 99.9.
La empresa de lácteos El Amanecer ha sido víctima de los desmanes generados por la compra de dicha firma por parte de Florencio Aldrey Iglesias, quien había disminuido notablemente los sueldos de los trabajadores una vez que asumió como nuevo propietario.
Pero ahora una nueva etapa va comenzando en la historia de una compañía que fue abandonada y quedó en manos de sus empleados, que lucharon durante mucho tiempo por mantener su fuente de trabajo. Noticias&Protagonistas se ha ocupado de darle un espacio al tema y reflejar el desarrollo de esta historia.
Esta mañana en la 99.9, Fabio Pandiani explicó cómo llegaron a la decisión de formar una cooperativa: «desde mayo fuimos abandonados nuevamente en la fábrica, subsistimos con un poco de insumo y mercadería para tratar de darle alimento a la gente. Hoy en día, ya hace un mes que tomamos la decisión de formar cooperativas para salvar los puestos de trabajo. Hay un desastre jurídico fuera de la empresa y ningún oferente se quiere hacer cargo; hicieron maniobras y la única manera que tenemos de cuidar nuestros puestos de trabajo es mediante una cooperativa».
Los pasos legales ya han sido completados y los trabajadores cuentan con el apoyo fundamental de varios sectores. «Ayer hicimos un curso de capacitación; entregamos los papeles a la Provincia para que nos aprueben la matrícula y nos den el número de CUIT que nos permita empezar a facturar como cooperativa. Ya la tenemos un 75% u 80% concretado. Completamos la comisión interna y la comisión de la cooperativa», resaltó Pandiani.
Los trabajadores no quieren dejar pasar demasiado tiempo para empezar con los trabajos y absorber capitales, con el obetivo de seguir trabajando y llevando el alimento a sus familias: «estamos esperando acelerar los pasos con gente del Gobierno provincial y nacional, junto con el sindicato, para que se haga la matrícula lo antes posible».
Una vez confeccionados los documentos necesarios, podrán financiar el movimiento de la empresa. «Vamos a necesitar capital operativo. El proyecto de la cooperativa implica que nos puedan entregar subsidios por empleados, un estilo de fondo de desempleo; pero llegará cuando nos den la matrícula. Hay oferentes de distintos sectores que quieren invertir en capital de trabajo, pero no se puede hacer nada hasta que tengamos la seguridad de la matrícula. Hasta ahora tenemos que demostrar que queremos ser una cooperativa de trabajadores y no que estamos haciendo una cooperativa fantasma donde los empresarios nos están utilizando», afirmó el dirigente.
Por último, destacó que el apoyo de algunos sectores fue fundamental para desarrollar la idea, aunque no precisó de quiénes se trata: «tenemos sectores políticos, sociales y gremiales que nos apoyan para que esto salga».
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