El promedio diario se situaba en 4.900.000 litros, algo que se mantuvo por el buen caudal de precipitaciones que se registró en el inicio de la presente primavera.
Pese a esto, las lluvias están haciendo falta y los productores esperan con ansias las lluvias anunciadas para el fin de semana.
“De no darse las mismas el pasto comienza a perder calidad y tiene impacto directo en la producción” comentó Ruben Rava, directivo de la Asociación Nacional de Productores de Leche.
“Muchos productores aprovecharon las últimas semanas para realizar reservas de calidad y seguimos esperanzados en tener un noviembre con mucha leche” finalizó.