Dicen que lo que hay es un “tremendo negocio ministerial y gerencial”.
Trabajadores activos de Lácteos los Andes, que ya han suministrado informaciones documentadas anteriormente por Aporrea, pero que no se identifican públicamente “por temor a que arremetan contra sus personas dentro de la empresa”, envían una nota en la que increpan a Ricardo Sanguino, del Polo Patriótico, por sus declaraciones recientes sobre la supuesta normalidad de la producción en Lácteos Los Andes y en otras empresas estatales de alimentos a escala nacional.
Le preguntan: ¿Usted ha visitado todas las plantas de Lácteos Los Andes y distribuidoras, para decir con propiedad que están productivas al 100 %? Un trabajador que dice tener 13 años en la empresa afirma que “cada día vemos peor la planta matriz, que es Cabudare, que no está produciendo al 100% y por este motivo el producto no se ve a nivel nacional”. Aseguran que hay falta de materia prima y que “nuestros carros o gandolas no salen a todos los destinos nacionales, dan prioridad a Caracas y lógico a Barquisimeto y sin embargo no llega al 100 % del producto”. Le recomiendan “darse un viajecito a Mérida, porque allí no va a conseguir nada que diga Lácteos Los Andes”.
Informan que “la planta de Nueva Bolivia no esta produciendo lo suficiente; sólo un 35 % de su capacidad y estuvo paralizada por unos días”. Y agregan: “Si nos paseamos por Valencia y Maracay, muy poco se ven nuestros productos lácteos”. Señalan que a estas ciudades contaban con el suministro de un promedio de 40 gandolas semanales, y que actualmente no se llega a 10, lo que significa que las plantas no están produciendo y sólo alcanzan a un 45% de su capacidad. Aseguran que “estamos peor que en años anteriores y esta ha sido la peor gerencia que hemos tenido”.
Por eso le reclaman a Ricardo Sanguino: “deje de engañar al pueblo, aunque ya el pueblo despertó y sabe que ustedes son unos disfraces”… Se quejan de que “es lamentable que hasta el Ministro de Alimentación, se preste para engañar de esta forma; en esta gente no se debe confiar”.
Finalmente agregan: “Estamos produciendo tanto, Sr. Sanguino, que hasta la leche se trae de Uruguay” (muestran foto de etiqueta). Concluyen que “aquí lo que hay es un tremendo negocio ministerial y gerencial y por eso nadie le hecha la paja al otro. Véalo usted mismo y después hable seguro de que allí dice hecho en Venezuela”
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