En diálogo con El Observador, enfatizó que “sería una decisión muy grave para Uruguay”, porque “la fortaleza de nuestra lechería está en el cooperativismo”.
Explicó luego que Conaprole representa al 75% de la industrialización de la leche producida y que si se le añaden empresas como Clady, Calcar y Coleme ello crece al 80%, lo que habla a las claras de la participación del sistema cooperativo en el complejo lechero local.
Por otro lado, mencionó que, al mismo tiempo que se observan enfrentamientos en Argentina entre productores y empresas industriales, “acá vemos una cadena muy bien desarrollada, en la que hay confianza, en la que dentro de Conaprole hay igualdad de precios, una apuesta al desarrollo de cuencas y muchos servicios”.
Destacó, además, el precio que Conaprole paga, superior al que abonan otras empresas que son privadas o extranjeras.
De Izaguirre remarcó, una vez más, que “sería muy grave” que Conaprole deje de ser una cooperativa, “especialmente para los productores chicos”.
Finalmente, instó a tratar de evitar que se llegue a la venta de Conaprole y apostar a articular soluciones mediante el diálogo, “porque no está bueno que se llegue a ese extremo”.