La realidad de los productores lecheros de Cardona y zonas aledañas, remitentes a Indulacsa observan cómo se va agravando la misma y se encuentran con la soga al cuello, dijo uno de ellos en las últimas horas.
El edil y productor lechero Leonel Silva, dijo que “está muy complicado el tema, no tienen otra escapatoria, están remitiendo para no tirar la leche pero los precios que está pagando hoy oscilan entre los $3.60, $4.00 y $4.10 y el costo del litro de leche para el productor es de $6.00. Eso a las claras muestra que los números no dan”.
Sostuvo que ha venido dialogando con sus pares y la mayoría de ellos está buscando compradores que les oferten más porque consideran que la situación es insostenible. “la empresa no es creíble para nadie; los productores han ido a la fábrica para tratar de conocer de primera mano cuál es la situación, si hay o no hay mercado, si es en verdad que está llena de quesos como se dice, pero resulta que cuando se llega hasta allí la planta está vacía, por lo tanto están jugando con los productores y creemos que esa no es forma de manejar el tema”, subrayó.
Recordó Silva que en Cardona viven directa e indirectamente de esta empresa alrededor de unas trescientas familias y si los productores resuelven irse, “la fábrica va a perder leche, materia prima. Además en su momento nos dijeron bien clarito que a ellos no les importa irse si las cosas no salen bien y tienen pérdidas. La verdad es que esta situación preocupa y mucho”.
Señaló que hace un mes y medio se llevó a cabo una reunión con representantes de la firma y se nos dijo que si “entraban en el cupo con Venezuela a vender queso, iban a aumentar el precio del litro de leche.
Lamentablemente no va a ser así, no le van a dar el cupo que quieren por no haber vendido antes a este país. Ellos vendían a través de CALCAR pero no lo hacían con la firma de Indulacsa. El panorama no es claro porque la fábrica no va a entrar a vender queso y tal vez se acomode seis o siete meses pero todo va a volver a ser igual. Si se le subiera el precio quizá algún tambero pueda aguantar, no cerrar, no vender el campo o dedicarse a otra cosa, pero así, hoy el presente y el futuro es oscuro”.
Silva dijo que en los últimos días, la Comisión de Ganadería del parlamento nacional propuso abordar el tema y el mes que viene habrá una reunión con el gerente de la fábrica, con productores, con el gremio de Indulacsa.
Supuestamente todos dicen tener la mejor buena voluntad pero ninguno da soluciones. “Hay gente que sólo se dedica al tambo con unas 30 ó 40 vacas y ya está endeudada y por tanto no puede hacer fardos, ni forrajes porque no tiene plata. Si se mira hacia adelante el panorama no es más alentador. El número de productores lecheros afectados anda en el eje de los 140 ó 150, afirmó el vecino cardonense.
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