El bajo precio promedio de $ 4,50 el litro es el determinante.
Los productores lecheros remitentes a la planta de Indulacsa en el departamento de Salto siguen en situación crítica por el bajo precio que reciben por su producción de la empresa que pertenece al Grupo Lactalis, lo que derivaría en que varios pequeños tamberos puedan cesar sus actividades en enero próximo.
La información fue destacada a El Observador por el presidente de Sofril (Sociedad de Fomento Rural de la Industrial Lechera de Salto), José Milessi, quién resaltó que el precio promedio que reciben los tamberos es de unos $ 4,50 por litro, sensiblemente inferior a otras industrias.
Milessi resaltó a su vez la asamblea efectuada por Sofril el pasado viernes con la asistencia del presidente del Instituto Nacional de la Leche (Inale), Ricardo de Izaguirre. En ese ámbito se valoró los esfuerzos bien encaminados para encontrar una solución a esta compleja situación, sin embargo no se vislumbra una salida a esta crisis en el corto plazo, sostuvo el dirigente.
La planta industrial salteña recibe diariamente más de 30.000 litros de leche, de unos 60 productores de Sofril. La mitad de esa cifra son remitentes de menos de 200 litros diarios, en tanto que el resto envía volúmenes de entre 2.000 y 4.000 litros. Sofril cuenta además con otros 30 productores que son remitentes a Conaprole.
Para varios de esos productores pequeños la situación es muy difícil y prevén que luego del secado habitual de las vacas que se hace anualmente, resultará muy complicado seguir en esta actividad cuyos ingresos les representa el sustento diario para sus hogares, dijo el dirigente.
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