Mayor asistencia a la Feria de Prolesa permite pensar en un horizonte mejor

Una concurrencia de productores 30% superior a la de hace un año generó satisfacción en la organización, que evaluó como positivas a las actividades, sobre todo al área demostrativa de manejo de agua en el tambo.
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Con una mayor asistencia de productores –se estima un 30%– en relación a la de 2016, se desarrolló la VII Feria de Prolesa, con un incremento en las colocaciones de los insumos que los tamberos allí adquieren a precios con importantes rebajas.
Álvaro Quintans, presidente de Prolesa, indicó a El Observador Agropecuario que «el balance es muy positivo porque nos acompañaron muchos productores, por el nivel y la cantidad de empresas presentes –unas 50– y porque hubo un fuerte interés en cada actividad», aludiendo a los cursos brindados, al 5° Concurso de Reservas Forrajeras, a las demostraciones en el área de manejo del agua para el tambo y a las visitas a la planta de granelización que posee Prolesa próximo a la Sociedad Criolla Mi Tapera (vecina a Santa Lucía), sede de las actividades.
Al hablar de la relevancia de las ventas en el outlet, comentó que «está claro eso con decir que, en un momento de costos altos, hubo una rebaja del 30% al 35% en la canasta de los insumos que los tamberos están utilizando».
«Hubo un marco distinto al del año pasado, cuando había precios bajos en lo internacional y en lo interno, y veníamos de tres meses con mucha lluvia; sigue siendo pesada la mochila por tres años de crisis, la iliquidez es importante, pero el horizonte por lo menos lo vemos de otro color», concluyó, destacando que para el éxito de la feria fue clave el trabajo de varios meses del equipo de Prolesa.
El concurso
Walter Lockhart, Jorge Rostagnol y Jesús Marichal fueron los ganadores el Concurso de Reservas Forrajeras, organizado por Prolesa y Nutral, cuyos resultados se divulgaron en la carpa institucional de la exposición.
El doctor Gastón Moroni, quien coordina una actividad que tiene por objetivo hacer un aporte al conocimiento de la calidad de la alimentación de los rodeos lecheros, destacó que se evaluaron más de 220 muestras de más de 150 productores, en tres categorías.
Los ganadores (ver el detalle en el recuadro adjunto) del primer premio recibieron una orden de compra por un valor de US$ 1.000 y los del segundo premio un vale por US$ 500.
El jurado estuvo integrado por el ingeniero agrónomo Yamandú Acosta, asesor permanente en el concurso; ingeniero agrónomo Alejandro Mendoza, por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA); ingeniera agrónoma Ana Bianco, por la Facultad de Agronomía de la Universidad de la República (Udelar); el doctor Alejandro Britos, de la Facultad de Veterinaria de la Udelar; el ingeniero agrónomo Diego Rodríguez, por Conaprole; y Moroni, por Prolesa.
Moroni, encargado del área de veterinaria y nutrición animal en Prolesa, explicó que «la evaluación es muy positiva, seguimos creciendo, el primer año hubo 160 muestras, luego un promedio de 130 por año y esta vez superamos las 220, con un nivel que mejora».
«Nos preocupa mucho ahora hacer las devoluciones a los productores, en un concurso que tiene como objetivo ayudar a que puedan hacer buenas prácticas de manufacturas, para lo cual también es muy valioso analizar las muestras y poder hacer formulaciones reales en cada dieta», dijo.
«El costo de hacer una reserva forrajera es muy elevado, y a la vez es bajo el costo de hacer después el análisis para ver qué tenemos realmente para alimentar a nuestro ganado, algo que además nos da muchos datos. Queremos que el productor, más allá del concurso, analice sus reservas para tomar mejores decisiones y ser más eficiente al alimentar», expresó.
Moroni admitió que «hemos visto mucha dispersidad, en algunas zonas, en algunos silos. Hay una cuenta básica: tenemos muestras de 20% de materia seca y otras de 40% y si un productor formula pensando que tiene 40% y en realidad tiene 20% está dando la mitad de materia seca y eso es un cambio muy notorio».
Pidió a los productores «estar en contacto con Prolesa, en cualquiera de sus 22 sucursales», a los efectos de lograr un asesoramiento personal sobre esta temática.
De cara a una próxima edición, «la vara quedó muy alta, pero es un lindo desafío, este año hubo muchas muestras y hubo diversidad de calidad. Este año vamos a cambiar la estrategia, en años pasados nos entrevistábamos con los productores que presentaban los mejores silos para tomar sus experiencias y sacar conocimientos, ahora haremos lo contrario, vamos a entrevistarnos con los que tuvieron menores niveles de calidad para ver en qué se falló y con ese relevamiento también aprender para beneficio de todos».
La activa
La ingeniera agrónoma Soledad Etchegaray detalló que en el área demostrativa de agua y manejo para el tambo, una de las innovaciones este año en la Feria de Prolesa, se establecieron tres estaciones para la interacción con los productores, una relacionada con el manejo del agua en la parcela para bebida del rodeo, otra con el manejo de efluentes a nivel el campo y la tercera relacionada con el riego de cultivos.
En cada caso se informó sobre tecnologías disponibles, de lo que ofrece Prolesa a los productores a partir de sus proveedores, para proceder del modo más adecuado.
«En el manejo del agua en las parcelas, para bebida de los animales, las inversiones no son altas y si se concretan los beneficios son inmediatos e importantes, no está generalizado pero es fácil de implementar y con mucha respuesta a la tecnología», afirmó.
El del manejo de los efluentes, «es un tema muy importante, hay muchas consultas de los productores, acá mostramos un irrigador de efluentes en funcionamiento (en este caso tirando agua), algo que se adapta a cada sistema que posea el productor y a cada escala de tambo».
En el área demostrativa de riego si bien se habló de opciones, se presentó en funcionamiento un pivot, para una superficie de al menos 20 has y que puede utilizarse en hasta 100 has, de la marca americana Reinke, «aunque para cada sistema en Prolesa hay varias soluciones», en un área donde las inversiones ya son de otra magnitud y que, por ende, cada productor debe evaluar su viabilidad.
Etchegaray dijo que «el agua es un recurso fundamental que, manejado, sistematizado, usando tecnología, se lo puede aprovechar mucho mejor para lograr un impacto muy importante en la parcela con el agua para bebida, en el manejo de los efluentes que es algo que hay que encarar por parte de quienes no lo han podido hacer y también en el tema del riego de los cultivos».
Los cursos
Otras actividades destacadas en esta edición de la Feria de Prolesa, fueron los cursos gratuitos brindados en dos ejes temáticos (con entrega de certificados): «Sistema de gestión para el control y prevención de mastitis – Experiencia tambo INIA La Estanzuela», a cargo de la doctora Tatiana Morales y Tomás López (INIA La Estanzuela) y «¿Es posible reducir el costo del ensilaje?», a cargo del doctor Javier Sabbía Carriquiry (Nutral).
V concurso de reservas forrajeras
Silo de planta entera de sorgo forrajero. El primer premio fue para Walter Lockhart, correspondiente a la sucursal Pando; el segundo premio fue para Pablo Olivera, de la sucursal Tarariras.
Silo de planta entera de sorgo granífero. El primer premio lo logró Jorge Rostagnol, de la sucursal Tarariras; el segundo premio lo obtuvo William Daghero, también de Tarariras.
Silo de planta entera de maíz. El primer premio fue para Jesús Marichal, de la sucursal San Ramón; el segundo premio se le otorgó a Avelino González, de la sucursal Cardona.
http://www.elobservador.com.uy/mayor-asistencia-la-feria-prolesa-permite-pensar-un-horizonte-mejor-n1088246

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Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

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