El modelo productivo debe apuntar a tener reservas cada vez más importantes y no depender tanto de los concentrados porque sus precios se han globalizado y no es posible competir con alimentos más caros.
El sector lechero está pasando por una combinación de circunstancias adversas que perjudican al sector. Es una “tormenta perfecta”.
Álvaro Carli, productor lechero de la zona de San José, dijo que crece la complejidad y son tres los factores que empujan para eso: el cambio climático, la inestabilidad de los mercados y la caída de los precios, y tercero la pérdida de competitividad.
Esa combinación constituyo lo que Carli denominó una “tormenta perfecta”
Ante esa situación “sólo podemos hacer cambios en el paquete tecnológico y en la manera que hacemos las cosas para generar buenas prácticas de manera de lograr un sistema productivo cada vez más similar al de nuestros competidores y evitar situaciones como las que estamos viviendo”, dijo.
Señaló que el modelo productivo debe apuntar “tener reservas cada vez más importantes y no depender tanto de los concentrados porque sus precios se han globalizado y no es posible competir con alimentos más caros”.
En estos días “estamos a reservas, silos, fardos. Se incrementó la parte de concentrados para sostener la producción”, expresó Carli.
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