La Cooperativa neocelandesa Fonterra abrió cuatro nuevas plantas lecheras en Nueva Zelanda, en la isla del sur. Una de las plantas quedan en Clandeboyu y otras tres en Edendale.
El director general de operaciones globales de Fonterra, Robert Spurway, dijo que esas expansiones generarán dinero, no solamente para 10.500 productores, sino también para ayudar a las economías rurales de la región.
Más de 60 nuevos empleos en el período fueron creados. Spurway dijo que además de los beneficios de larga duración que tienen las inversiones sobre las comunidades locales, ayudan a Fonterra a seguir con su estrategia de transformar más leche en productos y generar más retornos para la empresa y para los productores de leche neocelandeses, en un momento difícil.
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