El 2017 es un año que ha mejorado para la lechería y el clima ha hecho una buena contribución en ese sentido, destacó el presidente del Instituto Nacional de la Leche (Inale), Ricardo de Izaguirre, quien explicó que la producción creció 7,8% en los últimos 12 meses, lo que, sin embargo, no llega a cubrir la caída de 2016. Hasta octubre la producción ascendió a 1.550 millones de litros.
De Izaguirre diijo también que al productor le están pagando precios mejores, unos US$ 0,33 por litro en la actualidad, pero continúa con dificultades financieras importantes.
Este año las exportaciones han subido un poco, fundamentalmente por mejores precios. El valor de la tonelada este año está entre 6% y 7% por encima del año anterior.
Por otra parte, el presidente de Inale expresó su expectativa de que el Fondo de Garantías para reestructurar las deudas que estudia el Parlamento pueda cumplir con sus objetivos, al mismo tiempo que confía que el endeudamiento adicional de unos US$ 100 millones que tiene el sector pueda ser superado con mayor producción.
De Izaguirre afirmó que los litros de leche, en los tambos y en las industrias, son lo que pueden licuar ese endeudamiento, es decir, la carga de las amortizaciones que hay que hacer.
Comentó que a noviembre la deuda era de US$ 327 millones con los bancos y de US$ 20 millones con las industrias por concepto de insumos para producir cultivos forrajeros, más alguna deuda también por raciones.
De Izaguirre afirmó que el país gasta de US$ 60 a US$ 70 millones en raciones para las vacas por año y unos US$ 50 millones en pasturas. Esto demuestra lo que hay que invertir anualmente para mantener la actividad de producir en los tambos.
Consultado sobre las gestiones para mejorar la capacidad del proyectado Fondo de Garantías, con vistas a atender a una mayor cantidad de pequeños productores, recordó que hay planteos gremiales en ese sentido. Manifestó que los productores más chicos suman el 20% y que un 34% de ese porcentaje tiene deudas bancarias.
