Los empleados solicitan intervención de la empresa, así como la destitución de la gerenciaAlrededor de 150 trabajadores de la empresa Lácteos Los Andes se concentraron ayer frente al liceo Fermín Toro para exigir a las autoridades la intervención inmediata de la compañía. Jesús Villarreal, vocero del grupo, indicó que la empresa está en condiciones críticas y que desde hace tres años arroja balances negativos en su producción.
“La gerencia ha tenido a los trabajadores engañados, Lácteos Los Andes está en quiebra”, manifestó. De acuerdo con Villarreal, representantes de los trabajadores sostuvieron una reunión con el presidente de la empresa, Hairo Arellano, en la que se les informó de la gravedad de los estados financiaros. “Dijo que había recibido la empresa con números rojos”, comentó.
Adicionalmente, denunció que los camiones para la distribución están dañados y no han sido reparados en mucho tiempo. “El producto no sale a la calle, todos los camiones que usamos están malos”, explicó. Acotó que algunos productos han desaparecido del mercado por deudas con las envasadoras y la caída en la producción.
Añadió que los empleados en ocasiones son obligados a pernoctar en las plantas bajo condiciones infrahumanas. “Las habitaciones y los baños están en estados deplorables”, dijo. Una de las solicitudes es que se remueva a la gerencia de la empresa y que sus miembros sean enjuiciados.
No es la primera vez que los trabajadores de Lácteos Los Andes hacen esa petición. En noviembre del año pasado, empleados de la planta de Carabobo protestaron por varios días frente a la sede para denunciar atropellos por parte de la gerencia en Valencia y el incumplimiento de las mejoras emanadas del gobierno central. La planta en Mérida también fue tomada en 2012 por reclamos salariales.
La empresa, expropiada en 2008, se encuentra en la lista de las estatales que esperan por la discusión de contrato colectivo. A pesar de los problemas, durante 2012 Lácteos Los Andes anunció la diversificación de su cartera de productos y la ampliación de los puntos de distribución.
Amenazados. Villarreal teme que la protesta ponga en riesgo su trabajo. “El presidente Nicolás Maduro no sabe lo que está pasando, lo tienen con una venda en los ojos. Él tiene que enterarse aunque nos boten”, expresó. Algunos de sus compañeros han recibido amenazas de despido por participar en la concentración.
Indicó que otros trabajadores han sido amedrentados por manifestar su deseo a protestar. La nómina de Lácteos Los Andes asciende a 6.500 empleados. Parte del grupo fue atendido en la sede de la Vicepresidencia, mientras que otros esperaban respuesta desde Miraflores.
“Estos problemas están desde hace tres años, pero ya no podemos seguir así. Si hoy no nos dan respuesta, estaremos en protesta permanente hasta que nos escuchen”, aseguró Villarreal. El vocero añadió que la situación de la empresa se tornó insostenible desde la muerte de Hugo Chávez.
Caen utilidades
La Memoria y Cuenta del Ministerio de Alimentación, al que está adscrita la empresa Lácteos Los Andes, revela una caída en las utilidades de 61,4%, debido al incremento de los gastos operativos frente a los ingresos y los aportes al fondo de eficiencia socialista.
Parte del problema recae en que 80% de las ventas se destinan a redes de distribución socialista, a las que se le vende mercancía a crédito con plazos de 90 días, situación que afecta el flujo de caja de la empresa y su capacidad para honrar los pasivos con proveedores
El informe también confirma las denuncias de los trabajadores sobre las deudas con envasadoras, específicamente con Tetra Pak. Aún así, la producción mostró un incremento el año pasado de 16,8% con respecto al mes anterior. La empresa elabora productos lácteos, derivados lácteos, jugos, néctares, postres y otros alimentos de la cesta alimentaria.
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