La lechería en el Norte se normalizó como consecuencia de las lluvias, hay buena cantidad de pasto y los tambos achican costos bajando el uso de raciones», dijo a El País el titular de la Intergremial de Productores de Leche, Sergio Filgueira.
El productor aseguró que los tambos del Norte del país están saliendo del problema que generó la escasez de lluvias y comienzan a levantar cabeza.
«A partir de las últimas semanas las cosas cambiaron radicalmente, porque las lluvias ayudaron bastante. No sobra el agua, pero estamos bien», aclaró Filgueira.
A diferencia de la realidad que viven los tamberos que explotan sus campos en los departamentos del Sur del Río Negro, donde las lluvias fueron más abundantes, en el Norte faltaba el agua y la lechería era uno de los rubros más castigados.
Según Filgueira hoy la realidad cambió, «apareció mucho pasto de verano y aunque no es de buena calidad, está ayudando mucho a los tamberos».
La falta de lluvias provocó que muchos tambos tuvieran que consumir sus reservas forrajeras, para evitar mayores pérdidas en la producción de leche y un empeoramiento en la condición corporal de las vacas con las que producen.
Filgueira reconoció que el incremento del forraje en el campo «hizo disminuir el uso de raciones», posibilitando «una baja en los costos de producción de la leche que estaban históricamente altos».
Los tambos del Norte no sufrieron los problemas de mastitis que sí se están dándose en los predios del Sur, donde las lluvias provocaron un crecimiento significativo de las infecciones de ubre, provocando una venta récord de antibióticos. El fenómeno fue tan grande que incluso algunos laboratorios se quedaron sin stock.
La humedad y el elevado calor, provocaron una fuerte expansión de las bacterias en una época donde hay una gran cantidad de vacas «secas» (que no están en ordeñe), pero que están próximas a parir.
Mientras tanto, la lechería uruguaya sigue apostando a crecer y los precios internacionales motivan a los tamberos a producir mucha leche.
En los últimos años, el sector fortalece su camino de crecimiento. En 2013, la remisión de leche a planta creció 3,4%, según los datos de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria (Opypa/MGAP). El precio de leche al productor llegó a niveles récord y la suba de los costos se compensó a través de una mayor productividad por hectárea y por vaca.
Se espera que este año la producción se eleve otro 4%, según Opypa.
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