Visión. Industria y productores buscan mejorar márgenes
Productores e industriales locales del sector lácteo, esperan un aumento de los precios internacionales en los próximos meses. Auguran que en el peor de los escenarios, los valores se mantendrían en los niveles actuales, que son muy buenos.
Los precios de los últimos remates de lácteos de la neocelandesa Fonterra, que marca los valores en el mercado mundial, siguen tonificándose.
En el último remate, el precio promedio de los lácteos subió nuevamente 3,1%, situándose en US$ 3.756 la tonelada, con lo que se llegó a cinco aumentos consecutivos.
El hecho de que la leche en polvo entera – el producto lácteo de mayor exportación desde Uruguay- fuera el que más subiera, con un incremento de 5.8% alcanzando los US$ 3.654 por tonelada, fue considerado como clave.
«Las causas de estos aumentos pasan porque en el hemisferio Norte la oferta de lácteos es limitada, incluso en plena zafra de producción. Da la sensación de que el mundo tiene una oferta restringida y con una demanda que se viene recuperando», afirmó el presidente de la Cámara Uruguaya de Productores de Leche (CUPL), Horacio Leániz.
El gremialista destacó que este incremento ya no se puede considerar tendencia, dado que salvo situaciones puntuales y leves a la baja, los aumentos se están dando desde agosto del año pasado.
El vicepresidente de Conaprole, Wilson Cabrera coincidió en que la suba en el último remate de Fonterra es una señal del buen valor de los lácteos internacionalmente y un indicativo de que las cotizaciones de estos seguirían subiendo.
«Creemos que la leche en polvo entera debería ubicarse en no mucho tiempo en el eje de los US$ 4.000 por tonelada, precio que no se alcanza hace varios años, ya que la demanda está siendo muy firme y la oferta escasa», afirmó.
Leániz sostuvo que todo marca que la situación a futuro sería con precios todavía mayores debido a la citada relación entre oferta y demanda.
Estos valores a su vez son un piso de comercialización para Uruguay, ya que tanto por acuerdos comerciales, como por la situación de ofertante en la que se encuentra, el país comercializa a valores superiores a los que marca este remate.
«Uruguay exporta la mayoría de sus lácteos a mercados con los cuales posee preferencia arancelaria, lo que se traduce en precios de entre 15% y 20% superiores a los de la mayoría de los mercados internacionales», explicó Leániz.
El presidente de la CUPL informó que incluso a destinos donde no se cuenta con esa ventaja también se accede a precios superiores a la media mundial. Ello se debe a que se trata de mercados, como los países situados en la costa Oeste de África, que realizan compras puntuales, que necesitan los mismos con urgencia, y en donde a su vez se tiene fletes más baratos que competidores como Nueva Zelanda.
Cabrera, indicó que en Conaprole no se toma como referencia de precios los remates de Fonterra, aunque si es importante la suba, por que la mayoría de las exportaciones se colocan en mercados donde se entra sin arancel.
En ese sentido informó que está próxima a cerrarse una operación en la cual se exportarán 40.000 toneladas de leche en polvo entera a Venezuela a precios, que si bien no quiso precisar, son muy buenos.
VENEZUELA.
Consultado acerca de que puede ocurrir con el mercado de Venezuela, uno de los más importantes para Uruguay en lo que hace a lácteos y que realizó una fuerte devaluación días atrás en su moneda, Leániz no fue pesimista. «Todavía está por verse cual será el precio al que va a a importar. Hay que recordar que se acaba de salir de una situación en la cual no se otorgaban licencias, lo que se traducía en pocas o nulas operaciones a ese país. Ese era el peor escenario en la relación con ese mercado», afirmó. El productor sostuvo que la fluida relación que existe entre los importadores venezolanos y los exportadores uruguayos hace que los primeros tengan a los lácteos nacionales como opción número uno, especialmente en lo que hace a quesos.
En cuanto a los valores a los que se operaría, afirmó que «si bien la devaluación en ese país, que rondó el 32%, podría significar un ajuste a la baja en las cotizaciones, esta sería mínima». Agregó que «Venezuela hoy está pasando por una crisis de abastecimiento en los alimentos, sumado a que los ofertantes en lácteos, además de Uruguay, podrían ser Argentina, que no cuenta con un gran stock exportador y Nueva Zelanda, que entra con fletes más caros».
Leániz señaló que «en este escenario Venezuela no está en situación de fijar los precios, sino de ser un tomador de ellos».
Cabrera le restó importancia a la reciente devaluación en Venezuela, porque ya las hubo en el pasado y no se vieron mayores diferencias de precios en el mercado.
El País Digital
